Dice: “Me gustaría empezar con una frase de Mae West, porque grafica qué es el pop: No es lo que digo, sino cómo lo digo; no es lo que hago, sino cómo lo hago, y cómo me veo cuando lo hago y lo digo".
"La primera vez que vi una obra de Warhol fue entre el ‘63 y el ‘64 en la Galería Rubbers, a pasos del Instituto Di Tella. Quedé impactado porque no eran piezas únicas, sino reproducciones de una serie. Terminar con el original y llegar a más gente me pareció una idea supermoderna. Aunque el pop local se hizo con cosas muy nuestras, tanto que Pierre Restany, prestigioso crítico francés, lo llamó pop lunfardo".
"Creo que el pop provocó un quiebre en la manera de ver y hacer arte que hoy sigue provocando destellos de alegría. Por eso, tal vez, no me gustan las series de Warhol sobre la silla eléctrica o los accidentes; reconozco su interés, pero los símbolos de la violencia no van conmigo. Veo la irrupción del pop como lo más parecido a una fiesta. Cito a Warhol: Lo hermoso es que América ha fundado una tradición según la cual los consumidores más ricos compran en esencia las mismas cosas que los pobres. Uno se sienta delante de la televisión y bebe Coca-Cola; y sabe que el presidente bebe Coca-Cola, Liz Taylor bebe Coca...”