Faltan pocos días para conmemorar en Argentina la Revolución de Mayo, ocurrida el 25 de mayo de 1810, uno de los acontecimientos más importantes de la historia nacional. Ese día se formó la Primera Junta de gobierno y el territorio dejó de depender del dominio español. En ese entonces, el virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros estaba al mando, pero fue obligado a renunciar por el pueblo, que se manifestó principalmente en la Plaza de Mayo, epicentro de los hechos.
La Plaza de Mayo es la más vieja de Buenos Aires y escenario de todos los acontecimientos políticos más relevantes de la historia argentina, menos en la Declaración de la Independencia. En ese entonces, el lugar se llamaba Plaza de la Victoria.
¿Qué pasó realmente el 25 de Mayo de 1810?
¿Cuál es el origen del nombre de la Plaza de Mayo?
Previamente, la Plaza de Mayo se llamó Plaza de la Victoria como consecuencia de las invasiones inglesas de 1806 y 1807, cuando la ciudad fue recuperada del dominio inglés.
El nombre de la Plaza de Mayo es en homenaje a la Revolución del 25 de Mayo de 1810, que sucedió en ese mismo lugar y que comenzó el proceso para declarar años más tarde la Independencia Argentina. A partir de esa fecha se inició una forma de gobierno propia. A su vez fue fundada por segunda vez el 11 de junio de 1580 por Juan de Garay, con el nombre de Ciudad de la Santísima Trinidad y Puerto de Santa María del Buen Ayre.
En aquella época, la plaza estaba rodeada de pequeñas aldeas hasta que se convirtió en escenario político y hoy es el centro de atención de todo lo que ocurra con el gobierno de turno. El primer acto político se llevó a cabo en 1890, cuando se inauguró la Unión Cívica, partido político que luego dio origen a la actual Unión Cívica Radical.
A partir de ese momento, es el lugar de protestas sociales. En 1977, se transformó e el lugar de reunión de las Madres de Plaza de Mayo, que pedían información de sus hijos desaparecidos durante el último proceso militar.
Uno de los objetos que llaman la atención en la actualidad en la Plaza de Mayo es la Pirámide de Mayo, un monumento construido en 1811 para festejar el centenario de la Revolución y que fuera modificado en 1856 por el artista y arquitecto Prilidiano Pueyrredón. Entre la Pirámide de Mayo y la Casa de Gobierno se ubica el monumento a Manuel Belgrano, creador de la bandera nacional.
Después de la Revolución de Mayo, la plaza fue sitio de corridas de toros. Actualmente, el lugar está rodeada de distintos edificios: el Cabildo, la Catedral Metropolitana, la Casa de Gobierno (conocida también como Casa Rosada, sede del Gobierno Nacional), el Palacio del Gobierno de la Ciudad, bancos y ministerios.
Si bien es centro de atención político, también suele ser uno de los lugares más visitados por turistas de todos los países.