Mientras quedó concretada la incorporación a préstamo a filas "xeneizes" de Gabriel Paletta, el ex defensor de Banfield y el Sub-20 cuyo pase es propiedad delLiverpool de Inglaterra, Boca podría también sumar en las próximas horas a Leandro Gracián, aunque para ello sus dirigentes esperarán al resultado de una reunión clave en España para definir el pase de Juan Román Riquelme.
Así, la dirigencia xeneize, que durante mucho tiempo pareció permanecer a la expectativa, va acelerando sus tiempos en la medida en que se acerca el cierre del libro de pases, con la presión que también significa el hecho de que el equipo haya arrancado con un empate y una derrota en el torneo Apertura.
Paletta solucionó los últimos detalles que habían quedado pendientes para su contrato y en los próximos días se sumará al plantel que conduce Miguel Angel Russo.
La negociación con el Liverpool se había resuelto con rapidez gracias a que Emiliano Insúa, reciente campeón mundial Sub 20, estaba actuando en el club inglés prestado por Boca, que ahora lo cederá definitivamente como parte de la operación.
En cuanto a Gracián, su representante, Jorge Cyterszpiler, negociará mañana con el Monterrey, de México, que tiene al ex jugador de Vélez Sarsfield apartado de su plantel principal, y la transferencia podría realizarse en una suma cercana a los tres millones de dólares.
Finalmente, por lo que respecta al tema Riquelme, lo que quedó claro luego de las declaraciones de Miguel Roig, presidente de Villarreal, es que no habrá nuevo préstamo, aunque no por eso quedó abortada la posibilidad de que el jugador vuelva a Boca.
Mientras el enganche ya está en España, listo para retomar los entrenamientos, debe llevarse a cabo una reunión clave entre Roig y Juan Marcos Franchi, representante del futbolista, que según algunos informantes tendría lugar mañana en tanto que otros la esperan recién para el viernes.
Eliminado el tema del préstamo, Boca debería adquirir por lo menos una parte del pase, y aquí comenzaría a estudiarse la posibilidad de cederle al club español algún porcentaje de jugadores que le interesan.
No debe perderse de vista el hecho de que, en un año electoral, si Riquelme no llegara, el costo político podría ser muy caro para los dirigentes.
La semana pasada, Juan Carlos Crespi, disidente del oficialismo, dijo que el regreso de Riquelme era un hecho. De inmediato, el presidente, Mauricio Macri, salió a la palestra para decir todo lo contrario: que era imposible traerlo.
En esas dos posturas encontradas hay un trasfondo electoralista, y si finalmente lo de Riquelme se concretara, es muy probable que Macri diga que fue un esfuerzo supremo y un milagro haberlo conseguido, mientras que Crespi se adjudicará la medalla de haberlo anticipado.
Por el contrario, si la negociación fracasara, el presidente diría que él ya lo había dicho y Crespi quedará en una posición incómoda.
En otro orden, el plantel de Boca cumplió un doble turno de entrenamientos en Casa Amarilla, tal como seguirá sucediendo los miércoles mientras no comience su participación en la Copa Sudamericana.
Este jueves, en tanto, tendrá lugar la principal práctica de la semana, como para comenzar a advertir si Russo tiene prevista alguna variante en la formación para enfrentar el domingo a San Martín de San Juan.
Fuente: DyN.