Si bien no fue una fiesta futbolera para sacarle el sombrero a nadie, el triunfo de Colombia en su vuelta a los mundiales es la demostración de la importancia de ser fiel a un estilo de juego.
Además, la goleada fue de una Colombia que tuvo toques argentinos. Su selección volvió a la Copa luego de 16 años y con un triunfo más que contundente. El 3 a 0 contra Grecia demostró al menos dos cosas: que el equipo volvió a los mundiales luego de 16 años a paso firme y que las ideas de José Pekerman en cuanto al toque se corresponden perfectamente con la tradición futbolera de aquel país.
El tercer elemento para tener en cuenta es que jugadores que juegan o que han jugado con éxito en la liga argentina ocupan un lugar clave y definitorio. Dos de los goles del partido fueron de Teo Gutiérrez (a los 58) y por el ex Banfield James Rodríguez (a los 93), mientras que la apertura del marcador fue del lateral izquierdo Armero, apenas comenzado el partido, a los seis minutos de juego.
Fue esencialmente un partido en el que se enfrentaron dos estilos: el juego al ras del piso, basado en los pases y la circulación, frente a un sistema más directo, basado en el pelotazo de los europeos. Y en esa lucha entre ambos estilos, la diferencia fue notoria: los griegos sólo tuvieron una ocasión neta, cuando el partido iba 2 a 0, un cabezazo de Theofanis Gekas.
Luego del gol inicial, Colombia se mostró un poco más conservador. Defendió con mucha gente, incluidos Cuadrado y Víctor Ibarbo, que retrocedían cuando Grecia tenía la pelota. Pekerman sorprendió alineando a Ibarbo de entrada en lugar de Jackson Martínez o Carlos Bacca, una apuesta por un 4-2-3-1 que funcionó en la ausencia del delantero estrella, Radamel Falcao. La hinchada colombiana fue otro de los puntos destacables del partido. Fueron amplia mayoría y se hicieron sentir desde el principio del juego.
Claramente, el mejor momento de Colombia fue en el segundo tiempo, mientras en la primera parte se mostró más conservadora. Hubo que pasar los primeros 45 minutos, hasta encontrar una línea más efectiva de juego. Así, llegaron los goles de Teo, luego de un córner y el de James Rodríguez, casi al terminar el partido.
“Haremos un buen mundial”
Luego del partido, desde el vestuario triunfador se enfatizó el hecho de que la victoria fue obtenida por jugadores que en su totalidad tenían su primer partido mundialista; el técnico colombiano dijo: “Muy felices, para un debut, con jugadores que nunca habían jugado un mundial, es una satisfacción”, comentó el técnico de Colombia, José Pekerman. “Siempre preparamos el partido de esta manera, algunas cosas salieron, otras no, pero me parece que estuvimos muy concentrados, y pudimos demostrar que vinimos a hacer un buen mundial”.
“Lo importante de hoy –dijo– es que aun cuando Grecia creció mucho y aun perdiendo la posesión, el equipo no se desordenó, que es algo muy importante en este tipo de competencias. Mantuvimos una tranquilidad al margen que Grecia tuvo oportunidades”, destacó.
James Rodríguez dijo: “Pareció que estuviéramos jugando como en Barranquilla”, luego de marcar un gol en el triunfo 3-0. “A mí la verdad me pone esto feliz y estar aquí es un sueño hecho realidad”.