DEPORTES
CHINO MAIDANA, EN EE.UU.

“Colón sigue en Primera y yo lo emboco a Mayweather”

El santafesino, que peleaba por 30 pesos, ahora lo hará por 8 millones de dólares. Confía en el poder de sus puños y hace fuerza por su club.

Pégue, Chino, pégue. Maidana en el gimnasio, en su rutina diaria. Se entrena en California desde el lunes.
| Gentileza James Dayap / Team Maidana

Marcos René Maidana es un campeón escapado de las tradiciones, es casi un rebelde del gremio de las grandes figuras del boxeo. Tiene algo de tipo gaucho porque tiene mucho de moderno, pero más que eso tiene todo de pibe humilde. Nada ni nadie le hizo cambiar la forma de sentir el boxeo. Ni siquiera los aires de Oxnard, California, donde ya está instalado preparando el combate que sostendrá el próximo 3 de mayo en Las Vegas ante Floyd Mayweather, la megaestrella del boxeo actual: “Pelear contra el mejor de todos es un orgullo especial, pero tengo que mantener los pies sobre la tierra y pensar que es una pelea más, en la que tengo mucho por ganar y poco por perder”, lanza el Chino, apenas arranca el diálogo con PERFIL.

—¿Sos consciente de que pelear con Mayweather es una oportunidad única?
—Sí, pero no quiero pensar demasiado de esa manera, para mí tiene que ser, es en realidad, una pelea más.

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—Esta pelea está considerada la más importante del boxeo argentino de los últimos treinta años, ¿eso te genera alguna presión?
—Para mí es muy bueno, me dan muchas ganas saber que genero mucha expectativa en Argentina. Más allá de la bolsa, yo acepté esta pelea para ganar y quedar en la historia. Y para quitarle el invicto a Floyd Mayweather, el mejor libra por libra de los últimos diez años. Sé que voy hacerlo.

La fortaleza de Marcos Maidana, su estilo y el efecto de su pegada lo elevaron a un nivel supremo en el actual boxeo mundial. El impacto que causó con su aplastante triunfo ante Adrien Broner el año pasado fue tan grande que cambió la proyección del promotor de Oscar de la Hoya, que planeaba sus grandes carteleras alrededor del propio Broner y del Pretty Boy Mayweather, que en principio buscaba enfrentar al británico Amir Khan.

—¿Por qué pensás que Mayweather te dio la oportunidad de enfrentarlo? ¿Qué tenés vos que no tengan otros boxeadores?
—Yo me gané la oportunidad en el ring. Siempre peleé con quien me pusieron en el camino, nunca le dije que no a alguien. Fui de punto con Víctor Ortiz y le gané, me pusieron a Erik Morales y le gané. me ofrecieron subir de peso para pelear con Devon Alexander y lo hice sin drama. quisieron inflar a Broner y les cagué el negocio, je.

—¿Cómo te imaginás la pelea?
—Va a ser difícil, dura. No hay que respetarlo demasiado. Tengo que salir tirando golpes. La presión de ganar y demostrar que es el mejor de todos la tendrá él.

—¿Cuál de tus virtudes necesitarás más para ganarle?
—Tengo mucha confianza en mí. Mayweather sabe que se tiene que cuidar porque mi mano es pesada y con un golpe lo puedo tirar o noquear.
En Oxnard, el Chino afina su preparación con su técnico, Robert García, al que le cabe el mérito de haber pulido al boxeador santafesino. Hace más de cinco años que Maidana está alojado en las grandes ligas del boxeo mundial. Desde aquella noche memorable de 2010, en la que venció por nocaut técnico al mexicano Víctor Ortiz, en Los Angeles, se instaló en el escalón de los privilegiados. En el medio perdió ante el ucraniano Andriy Kotelnik, en 2009, y con Amir Khan, en 2010. Pero siempre enamoró al público.

—¿Creés que Mayweather tiene algún punto flojo arriba del ring?
—Yo trato de ver videos de sus peleas para buscarle los defectos, pero realmente no le puedo encontrar ninguno, je. Es muy buen boxeador y conoce todas las mañas sobre el ring

—Alguna debilidad le debés haber notado…
—En su carrera le pegaron muy poco. El baja mucho las manos y conmigo eso puede ser terrible.

—¿Cómo vas a bancarte su pedantería a la hora de tenerlo cara a cara por primera vez?
—Que haga y hable lo que quiera. Esas cosas me cargan de motivación a la hora de subir al ring; ahí me va a conocer de verdad.

Este hombre de 30 años y un récord de 35 victorias (31 KO) y 3 derrotas, nació y se crió en un hogar humilde de Margarita, un pueblo de 3 mil habitantes ubicado en el norte santafesino. En su infancia desordenada, la escuela sólo fue una anécdota y el amor por los puños, una certeza. A los 15 años entró a un gimnasio, cansado de gastar los puños en rencillas callejeras. “Ser boxeador me salvó de muchas cosas”, suele decir. Hoy, el Chino ha cruzado el puente que separa esa vida de emergencia. Hoy sus dientes están más blancos y sonríen porque el viejo Orlando pudo arreglar el rancho y su madre, Olga, puede viajar a Estados Unidos para verlo pelear. Hoy el bolsillo está lleno para brindarles una vida digna a sus hijos, Marcos Nahuel y Emilia.

“Arranqué a pelear por 20 o 30 pesos con tipos que eran más grandes que yo. Peleaba todos los fines de semana para hacerme una moneda porque no trabajaba, andaba de vago. Fijate lo bien que estoy ahora y lo mucho que me pagan, jaja”, recuerda, mientras en la mirada se le dibuja la cifra millonaria que ganará por pelear con Floyd Mayweather. Los que conocen el mundo del boxeo en Estados Unidos estiman que, entre la bolsa y los ingresos de televisión que genere la pelea por el sistema pay per view (pagar para ver), Maidana recaudará alrededor de 8 millones de dólares por subirse al ring a enfrentar a Mayweather.

—¿Qué tenés pensado hacer con el dinero de la bolsa?
—Yo siempre peleo por el bienestar de mi familia. Me gusta ver a mi familia contenta y que no le falte nada.

—¿Cuánto cambió tu vida en estos días?
—No. No cambió mucho porque yo no quise que cambie. El cambio más grande lo noté en la cantidad de notas que tuve que hacer, ja.

—¿Serías capaz de abandonar el boxeo en caso de ganarle a Mayweather?
—De lo único que estoy seguro que voy a hacer después de la pelea es estar con Yoyo y Emilia, mis hijos, y mi señora, Mariana. Ah, también voy a ir a ver a Colón.

—¿Qué es más difícil: que vos le ganes a Mayweather o que Colón se salve del descenso?
—Colón sigue en Primera y yo le emboco una mano a Mayweather y hago historia. Total, soñar no cuesta nada.

—¿Te gustaría ser más grande que Monzón?
—No, Monzón es intocable, fue muy bueno. Yo simplemente quiero vencer al invencible de Floyd Mayweather.

 

Pretty Boy, el mejor de los últimos diez años

Casi todos los humanos intentan  alcanzar un halo de inmortalidad. Algunos lo buscan por el lado bueno; otros, al revés. Millones cuajan en la intrascendencia y muy pocos logran su cometido. Floyd Mayweather Junior es uno de esos pocos boxeadores contemporáneos que portan esa aureola de leyenda inmortal del deporte.

Con 36 años y con cinco coronas mundiales (superpluma, ligero, superligero, welter y superwelter), el Money Mayweather, como lo apodan, se deleita sabiendo que las cosas se hacen a su manera en el negocio grande del boxeo. El multimillonario contrato de 200 millones de dólares que firmó con la cadena televisiva Showtime por seis combates le permite elegir el rival más conveniente para recaudar cifras siderales en venta de pay per view. Se estima que en la última pelea ganó 41,5 millones de dólares.

Sin tener el brillo que pretende el espectáculo pugilístico en los Estados Unidos, a Mayweather le sobra categoría para estar considerado el mejor boxeador del mundo de la última década. Su estilo no es de un tirador de golpes; es más bien un especialista en esquivarlos, pegar con certeza y volver a pegar. Parte de su eficaz estrategia que lo mantiene invicto en 45 peleas es huir y pegar en retroceso.

Floyd Mayweather nació en Gran Rapids, Michigan, y se inició en el boxeo a los 8 años. Es hijo del boxeador Floyd Mayweather Sr. y sobrino y pupilo de Roger Mayweather, ex campeón mundial.