En un partido emotivo, Estudiantes venció 2-1 a Nueva Chicago, por la 13era fecha del torneo Apertura. Pavone y González en contra marcaron para los locales. El Pipita Higuaín descontó para los de mataderos. El encuentro se jugó en el Estadio Ciudad de La Plata.
El encuentro comenzó con todo. El León lastimaba con el talento de Juan Sebastián Verón, que abastecía a la dupla ofensiva Calderón-Pavone. Mientras que los pincharratas estaban mejor parados en el campo de juego, el Torito, de la mano de Federico Iguaín intentaba revertir lo que se venía.
Pasados los quince minutos, Mariano Pavone terminó un contraataque letal, con disparo que se clavó en el ángulo izquierdo del buen arquero visitante, Daniel Vega: 1-0 para Estudiantes, estaba bien.
Pese a que los dirigidos por el Cholo Simeone eran superiores en volumen de juego, Chicago se la ingenió para complicar a la defensa Pincha. Enseguida después del gol de Pavone, milagrosamente Estudiantes salvó un gol sobre la línea, tras un tiro de esquina visitante.
El partido era dinámico, con un mediocampo libre de marca, los volantes de Estudiantes se sentían cómodos para desbordar por los costados. Galván junto a Benítez no eran bien controlados por la defensa de mataderos, pero fue de un centro que el pincha estiró ventaja.
A los 32 minutos, de una pelota aérea -una de las armas predilectas de El León durante este campeonato- llegó un cabezazo fallido del número 6, Agustín Alayes, que provocó que el número 2 visitante, Adrián González, se chocara con el esférico, para convertir en contra el segundo de los de La Plata.
Ahí Chicago pareció despertarse. Otra vez después de un córner tuvo el gol. Entre el guardameta Mariano Andujar y la defensa local evitaron el descuento merecido del combinadazo conducido por Rodolfo Motta.
Y a los 40 minutos, Pietravallo le bajó una pelota al pipita Higuaín, quien definió ante la salida de Andujar: 2-1, el resultado era más justo en relación a lo producido por ambos equipos durante la primera mitad. Así se fue una gran primera mitad.
El segundo tiempo comenzó más tranquilo, sin embargo, Pavone, a pura guapesa trabó y ganó por la franja derecha, desde donde sacó un centro que terminó incrustándose en el travesaño del arco del Torito. Se salvaba Chicago.
Al mismo tiempo que Chicago equilibraba el encuentro, Estudiantes sufría a los 26 minutos las expulsión del número 22, Rodrigo Braña, por lo que se avecinaba un aparente oscuro escenario para el Pincha.
Sin embargo, con uno menos, Estudiantes supo contener el ataque de los de matadores, para llevarse un gran triunfo que lo coloca en la cima del campeonato, por lo menos hasta que jueguen River y Boca. Para la anécdota, sobre el final, Agustín Gómez –que reemplazo a Vega lesionado-, le contuvo un penal a Pavone.
