Un enorme paredón que da al fondo de uno de los arcos de la cancha con la leyenda “El Famatina no se toca” era el reclamo más visible del Club Atlético Chilecito en contra de la instalación en La Rioja de emprendimientos mineros a cielo abierto. Al menos hasta hace dos meses, cuando el Gobierno provincial de Luis Beder Herrera decidió donar indumentaria deportiva para todos los equipos de la Liga Riojana de Fútbol. Las camisetas que rezaban en el pecho “Defendamos la vida, defendamos el agua, defendamos el trabajo. Minería responsable” prendieron la mecha. Las autoridades del club sintieron que su necesidad era usada para hacer publicidad a favor de la explotación minera, y buscaron el impacto de un hecho simbólico: la noche del 6 de junio, rodeados de jugadores y vecinos, las prendieron fuego.