Un impresionante accidente en la carrera final del Stock Car V8 brasileño, en el cual el piloto Gualter Salles (Chevrolet) sufrió la fractura de ambos brazos, determinó la inédita suspensión de la competencia desarrollada en el autódromo "Oscar Alfredo Gálvez".
El episodio ocurrió cuando el auto comandado por Salles recibió un leve toque desde atrás en plena recta, a gran velocidad, por parte del vehículo conducido por su compatriota Guto Negrao (Chevrolet). Tras ese toque la máquina de Salles dio tres vueltas en el aire pasando por arriba del alambrado, sin tocarlo, para terminar en el foso previo al túnel de la recta opuesta del trazado porteño.
Del auto de Salles sólo quedó la estructura metálica, ya que lo demás voló por el aire a medida que iba dando tumbos.
En tanto, miembros del equipo médico de la categoría y del TC 2000 consiguieron rescatar al piloto de la incómoda situación en que había quedado, tras lo cual se comprobó que había sufrido la fractura de ambos brazos.
De esa manera, la accidentada carrera, que ya había sufrido tres neutralizaciones por diversos despistes, finalizó abruptamente con bandera roja y el ganador resultó Ingo Hoffmann (Mitsubishi), segundo fue Felipe Maluhy (Mitsubishi) y tercero Luciano Burti (Wolkswagen).