El asesinato de Fernando "Cocusa" Pereiras, el DT de futsal de Munro volvió a poner sobre el tapete mediático la violencia en el ámbito del fútbol. El futsal o fútbol de salón es un deporte bajo techo, que se juega en dos tiempos de 20 minutos en una cancha de 20x40 metros. Y al igual que en el básquetbol, el reloj se detiene cada vez que el juego lo amerita.
Damian Stazzone, jugador de Futsal de San Lorenzo de Almagro, señaló: “La violencia no es algo específico del futsal. Creo que tiene que ver con la violencia que hay en general en la sociedad, que se puede dar también por un problema de tránsito o en recital. Pero el fútbol despierta la pasión y esa locura de los argentinos”.
En relación a las diferencias que existen con el fútbol de once jugadores, Stazzone precisó: “Al no haber alambrados ni policía en las canchas de futsal, los hinchas o los familiares tienen a mano a los jugadores y a los técnicos, y tiene la facilidad de pegarles, por ejemplo”.
Por su parte, Héctor Straface, presidente de Pinocho Futsal, un club que ostenta varios récords en el futsal argentino, manifestó: “Nosotros estamos en una liga totalmente distinta al club de Munro. Al jugar en primera, tenés exigencias mayores, y cuando se juegan los partidos tenés que tener como mínimo dos policías, por ejemplo. Cuando alguien del público se extralimita, directamente lo sacamos. A eso lo tenemos controlado”.
Y agrega: “A veces los padres se piensan que tienen a Messi jugando. Si es así, les ponemos un freno y les hacemos entender que el que maneja todo es el DT. Porque en definitiva, si sufrimos una sanción, el que la termina pagando es el club”.
"Acá no hay barras grandes. Puede haber simpatizantes, pero son canchas más reducidas y están más controlados. En un partido de primera se pueden juntar como mucho mil personas entre ambos clubes", indica Straface.
“El futsal es un deporte de familia”, dice Caio Martino, DT de fútsal femenino en Racing, al tiempo que define a su profesión como “una tarea linda, pero necesitás haber jugado para entenderla”.
Nicolás Sarmiento, arquero de Palma Futsal en España, coincide: “No creo que la violencia sea algo exclusivo del futsal. Creo que somos una sociedad que está en un punto crítico de violencia pero no solo física sino también verbal”.
El joven portero de 24 años, que integró la lista de los diez mejores arqueros del mundo, nominado por el prestigioso sitio Futsal Planet, añadió: "Las situaciones que se viven en el fútbol tienen un componente económico. El futsal no mueve el mismo dinero y no creo que se llegue a situaciones de igual violencia. Esperemos que se mantenga en su línea de deporte familiar, de ambiente donde uno puede ir con sus nenes y con la familia entera y disfrutar de un lindo espectáculo”.
Finalmente, Guillermo Freire, DT de futsal en el club San Martín de Burzaco, sostuvo: "Hay padres que en vez de llevar al hijo para que se divierta y pasar un buen momento, los lleva para que crezca como jugador para que sea un Messi, que sea el salvador de la familia. Creo que también la carencia económica que tienen los clubes hace que para ahorrarse un dinero, los padres de los mismos chicos sean los directores técnicos, y lo miran desde otro lugar. Tienen el fervor del padre que quiere que su hijo gane. Nosotros también como entrenadores queremos que el equipo gane pero no a cualquier costo".