“Estamos viviendo con una irritación general que no es común”, dijo el presidente de la AFA, Julio Humberto Grondona, al salir de la reunión del Comité Ejecutivo en que se dispuso permitir solamente el ingreso de socios de los clubes locales a los estadios.
Según el dirigente, quien en su contacto con los medios intentó en todo momento transmitir optimismo y minimizar el problema de la violencia, la medida será positiva y tendrá un efecto casi mágico, ya que “lógicamente, las hinchadas no van a estar” en las canchas.
No obstante , reconoció que los violentos “pueden ser socios” y que, por ello, para que realmente queden afuera de los estadios las fuerzas de seguridad deberán colaborar aplicando el derecho de admisión, al que calificó como “un hecho muy positivo”.
“Todos estamos colaborando y tirando parejo”, manifestó Grondona en relación a las charlas que viene manteniendo con autoridades gubernamentales para terminar con la violencia en el fútbol. En el mismo sentido, el mandamás del fútbol argentino se refirió a la decisión del gobernador bonaerense Felipe Solá de no prestar custodia policial a las movilizaciones de hinchas diciendo que “nunca estuve de acuerdo con estos acompañamientos”.
Grondona aclaró, además, que la medida adoptada por el Comité Ejecutivo regirá sólo “hasta el final de la temporada”, y que ya había imaginado tener que tomarla en virtud de la situación por la que viene atravesando el fútbol argentino.
