Al presidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), Max Mosley, le gusta que una mujer vestida de uniforme alemán lo domine pero esas "fantasías carcelarias" no tienen ninguna connotación nazi, según testificaron este martes las participantes en sus orgías.
En el segundo día del juicio que Mosley lleva adelante contra el diario News of the World por violación de la vida privada, la rubia "A", la castaña "D", la alemana "B" y la morena "C" dieron testimonio detallando la escena sadomasoquista cuyo video fue difundido por el periódico. En la sala gótica del Tribunal Supremo, todas las "amigas" de "Mike", como lo llamaban, negaron "la orgía nazi" descrita por el diario.
El presidente de la FIA, hijo del ex responsable del movimiento fascista británico en los años 30, no negó que le guste el sadomasoquismo pero sí las connotaciones nazis.
El video mostraba a Max Mosley siendo dominado por unas mujeres vestidas con trajes a rayas de preso o uniformadas como soldados alemanes. Se trataba de una "fantasía carcelaria", explicó "D" al juez. "No vi nada de nazi en ello", agregó.
Negando cualquier clase de brutalidad, asegura que esas sesiones pueden ser dolorosas pero "no insoportables". "Prefería ir a una sesión sadomasoquista que al dentista", afirmó. Además, habló de una "gran familia" para describir el acto, en el que eran "como niños jugando a indios y vaqueros". "Se fija un objetivo, doce bastonazos. Es como una competición. La sensación que se siente después es la mejor del mundo", agregó.
Mosley, de 68 años, explicó por su parte que el hecho de elegir el alemán "añadía excitación" pero negó una vez más toda connotación nazi. La sesión no era en absoluto "nazi", confirmó con un fuerte acento alemán la castaña "B", que admitió haber hecho el papel de carcelero vestida con una chaqueta de Luftwaffe, la aviación alemana. "Es un insulto decir que ser alemán es ser nazi. Mis abuelos no eran de ese partido", declaró indignada.
Fuente: AFP