A fines de la década del 30 y comienzos de los '40 el delantero Luis Arrieta era una de las figuras de Lanús, recordado por una de las goleadas de ésa época, un 8 a 2 a Argentinos de Quilmes con cuatro tantos suyos. Luego, el rápido ascenso del equipo "granate" -tiempos del gran centro medio León Strembel- mostró en el 51 a un atacante vigoroso, de buena técnica a la hora de definir, como José Florio, que hizo 21 goles y se convirtió en una de las figuras del campeonato.
Enseguida se lo llevó el Torino, de Italia, que había sufrido la desgracia del accidente aéreo en Superga y había perdido a la mayoría de sus futbolistas en la tragedia. Florio pasó por un millón y medio de dólares. Lanús construyó un gimnasio en el viejo estadio de madera. En 1955, un 'colimba' de gran manejo deslumbró a propios y extraños: Benito Cejas, cordobés. Tenía 20 años.
Cejas era sensación en el 56. En una jugada que el pueblo 'granate' condenó, Néstor Rossi, el "5" de River y la selección nacional, fracturó al soldado Cejas, en el Monumental. El partido terminó 0 a 0. En esa época se destacaba por su cabezazo el bahiense Urbano Reynoso, fallecido hace tres semanas.
Después del ascenso del 64, Angel Manuel Silva y Bernardo Acosta se transformaron en los ídolos de Lanús. En el 67 fueron inmortalizados como "Los Albañiles", invocación a la construcción en velocidad de paredes desde afuera del área hasta la definición adentro.
Acosta hizo dos veces cuatro goles y una, cinco. Fue contra Quilmes en el Metro del 67. Lanús ganó 7 a 2 y el notable definidor paraguayo convirtió cinco tantos. Los otros dos los hizo Héctor Minitti, puntero derecho. La delantera era Minitti, Martín Pando, Silva, Acosta y De Mario.
Aquél Lanús de 'Los Albañiles' tenía en defensa a Lorenzatto, Avalos, Ostúa, Melchor Sabella y Carnevale, en tanto llegaba a primeraOsvaldo Piazza, excelente defensor luego transferido a Francia. Pero la historia la escribían los de arriba.
Fuente: Télam