El español Rafael Nadal renunció hoy a disputar a partir del lunes el torneo de tenis de Wimbledon, donde defendía el título, y dejó así vía libre al suizo Roger Federer para que gane su 15º título de Grand Slam y recupere el primer puesto del ranking mundial de la ATP.
Otro favorecido por la ausencia del mallorquín será el argentino Juan Martín del Potro, quien pasa de ser quinto preclasificado a tomar la plaza del ibérico en el cuadro y debutará por ende ante el francés Arnaud Clement, número 49 del mundo, y no frente al siempre complicado italiano Andreas Seppi (48) como en principio había quedado estipulado por el sorteo.
Nadal anunció hoy su ausencia en la hierba londinense porque aún no superó "al cien por ciento" su problema en la rodilla y se encuentra "al límite" de sus fuerzas. "No jugar en Wimbledon es una de las decisiones más difíciles de mi carrera. Pero la situación lo hizo un poco más sencillo, no había opción", dijo el defensor del título en una conferencia de prensa en Londres tras perder un partido de exhibición ante el suizo Stanislas Wawrinka.
"Desafortunadamente, este año no estoy en condiciones de jugar en Wimbledon", agregó el español, quien hace un año le arrebató el título a Federer en uno de los mejores partidos de la historia del tenis.
Así, el suizo, cinco veces campeón en el All England Club, no sólo se podría convertir nuevamente en el número uno del mundo si gana el torneo sobre hierba, sino que pasaría a ser también el tenista con más torneos "grandes" ganados de la historia.
Un intenso trabajo físico de recuperación, primero en Mallorca y luego en Londres, no le bastó a Nadal, quien continuó diciendo: "Mi decisión es no presentarme de esta manera. Yo quiero ganar y mi sensación es que no estoy listo para ganar. No estoy al cien por ciento. Estoy mejor que hace unas semanas, pero todavía no me siento del todo bien. Tuve algunos problemas en mis rodillas en los últimos meses, pero uno siempre intenta una semana más, y otra, y otra".
"No sé cuánto tiempo estaré fuera", añadió el número uno del mundo, quien ya se viera afectado por la tendinitis de su rodilla derecha en su derrota ante el sueco Robin Soderling en los octavos de final de Roland Garros, que supuso su primera caída en París tras cuatro títulos seguidos.
Luego, Nadal tuvo que renunciar a jugar el torneo de Queen's y trató de estar en el tercer Grand Slam del año, hasta que hoy dijo que las pruebas mostraron que sufre tendinitis en ambas rodillas y que necesitará un período indeterminado de descanso.
"Es duro de aceptar. Tal vez cometí algunos errores en mi calendario. Lo voy a analizar y aprenderé para la próxima vez. Ahora tengo tiempo para recomponerme, es lo que intentaré", terminó diciendo el mallorquín, quien señaló que su victoria frente a Federer hace un año fue "probablemente el mejor momento" de su carrera.
"Toda mi vida Wimbledon ha sido uno de los torneos más especiales. Los deportistas siempre juegan con dolor y uno nunca sabe dónde está el límite, pero ahora estoy en el límite. Tengo que reiniciar y volver más fuerte", prometió el español, que además desmintió estar sufriendo una "lesión crónica". "Me puedo recuperar, seguro", tranquilizó.
Fuente: DPA.