Ya sin ligazón alguna en lo contractual con el club español, Juan Román Riquelme concurrió hoy al entrenamiento del Villarreal y se despidió de sus ex compañeros, pero no lo hizo ni de los dirigentes ni del entrenador del equipo, el chileno Manuel Pellegrini.
Según informó el diario Marca, Riquelme, que no se había despedido del plantel cuando viajó a Buenos Aires para cerrar su pase a Boca Juniors, acudió hoy a las nueve de la mañana a las instalaciones de la ciudad deportiva del Villarreal y esperó dentro del vestuario a que sus ex compañeros llegaran.
Muchos de los ex compañeros de Román se mostraron sorprendidos por su presencia en el vestuario, ya que no tenían conocimiento de que iba a regresar para despedirse.
Riquelme permaneció allí hasta poco antes del inicio de la sesión de entrenamiento y, posteriormente, abandonó la ciudad deportiva del Villarreal antes de que llegaran los aficionados que acuden a presenciar el entrenamiento y los representantes de los medios de prensa.
Tras obviar al técnico Pellegrini, con el que mantuvo serias diferencias, el futbolista ni siquiera pasó por las oficinas del club. Además, no tuvo contacto hoy ni con el presidente de la entidad, Fernando Roig, ni con el consejero delegado, José Manuel Llaneza.
Riquelme viajará en las próximas horas a Japón para acompañar al plantel de Boca que jugará en el Mundial de Clubes, aunque no está inscripto en ese torneo.
Fuente: Télam.