Simeone apareció en la sala de prensa, dijo "soy el responsable" y se fue; el hall del Monumental hervía

"La responsabilidad es mía. Asumo toda la responsabilidad de lo que pasó en estos partidos. Después de perder con Boca no me presenté a hablar, pero hoy me pareció oportuno venir a decirles esto. No tengo más nada que acotar", señaló anoche Diego Simeone en un brevísimo contacto con la prensa, luego del empate con San Lorenzo que dejó a los millonarios fuera de la versión 2008 de la Copa Libertadores.

Abatido, con evidentes signos de tristeza, Simeone no dijo nada más. En el hall del Monumental, en cambio, las palabras eran muchas más "se va a acabar, se va acabar, la dictadura de Aguilar", "que se vayan todos, que no quede, ni uno solo", eran algunos de los cánticos, mientras decenas de policías de la Guardia de Infantería formaban un largo cordón para que la bronca de los hinchas no pase de los dichos a los hechos.

La reacción de los hinchas, en general plateístas de la tribuna San Martín, nació tras el empate 2-2 frente a San Lorenzo que significó la eliminación del equipo de Diego Simeone en octavos de final de la Copa Libertadores de América.

Varios de ellos continuaron expresando su disconformismo sobre la avenida Udaondo al pasar delante de las cámaras de televisión de distintos noticieros con insultos para Andrés D'Alesaandro, hoy en San Lorenzo, y para el entrenador de River, Diego Simeone.