Un trámite. Eso fue para Independiente su visita a Quilmes. Porque, por un lado, el equipo de Avellaneda ya no contaba en este Apertura con mayores incentivos que completar el fixture y sumar puntos para la clasificación a las copas. Pero también porque los de Burruchaga no necesitaron más que acertar en algunas jugadas aisladas para imponerse a un muy alicaído rival, que cada vez se sumerge más en el fondo de las posiciones y de la tabla de promedios para el descenso.
Los dos primeros goles del “Rojo”, de hecho, llegaron vía sendos cabezazos en jugadas con pelota detenida, cuando el trámite era parejo y ninguno de los dos desplegaba un juego colectivo medianamente bueno.
Incluso, Quilmes había contado con alguna chance bien clara para ponerse en ventaja a través de Diego Torres y Bustos Montoya cuando, sobre los 9 minutos del primer tiempo, llegó el córner muy bien ejecutado por Eluchans que Abraham cabeceó recto al fondo de la red defendida por Damián Grosso para decretar el 1-0.
Pocos minutos más tarde, la situación se repetía. Sin que su nivel de juego lo justificara, los visitantes elevaban su ventaja gracias a un tiro libre perfectamente ejecutado por Rodrigo Díaz, que el uruguayo Orteman conectó muy bien de cabeza.
El 2-0 era demasiado premio para un Independiente que seguía sin jugar bien ante un muy débil rival, que así y todo se las ingeniaba para quitarles la pelota a los de Burruchaga por largos ratos. Todo, sin embargo, transcurría dentro de un muy bajo nivel futbolístico, sin buenas jugadas y con muchos roces e imprecisiones que hacían pensar en que el trámite ya estaba prácticamente definido.
En ese marco, el gol de cabeza de Bustos Montoya, quien aprovechó un pelotazo al corazón del área de Diego Torres colocándola por arriba de Ustari, dio algún incentivo a los locales para ir por el empate. Pero eso mismo fue su perdición a los 28 minutos, cuando luego de un lateral, nuevamente el “Rengo” Díaz centreó hacia Denis y el goleador conectó la pelota con un exquisito tacazo para establecer el 3-1.
A partir de allí, los locales ya no tuvieron temple ni ideas para revertir la historia, y todo le resultó muy fácil a un conjunto de Burruchaga que, pese a ello, jamás mostró en la noche quilmeña un nivel acorde a las expectativas de su gente. Es cierto que por un golpe en el muslo derecho no estuvo su figura, Daniel "Rolfi" Montenegro, pero eso no alcanza a justificar tan baja producción del "Rojo", que apenas si le permitió en el segundo tiempo contar con algunas oportunidades más para aumentar ante un rival liquidado.
SÍNTESIS
Quilmes: Damián Grosso; Alfredo Bordón, Andrés Manzanares, Gozalo Juárez, Raúl Saavedra; Esteban García, Juan Fernandez Di Alesio, Martín Romagnoli, Sebastián Rusculleda; Diego Torres y Eduardo Bustos Montoya. Director técnico: Esteban Pogany.
Independiente: Oscar Ustari; David Abraham, Leandro Gioda, Guillermo Rodríguez; Hernán Fredes, Sergio Orteman, Sebastián Carrizo, Juan Eluchans; Rodrigo Díaz; Ismael Sosa y Germán Denis. Director técnico: Jorge Burruchaga.
Goles: en el primer tiempo, a los 10 minutos, Abraham (I); a los 20, Ortemán (I); a los 26, Bustos Montoya (Q) y, a los 28, Denis (I).
Cambios: en el segundo tiempo, a los 11 minutos, Gustavo Ibáñez (Q) por Rusculleda; a los 15, Rodrigo Soria (Q) por Rusculleda; a los 32, Emiliano Armenteros (I) por Díaz y David Solari (I) por Denis; a los 43, Carlos Sciucatti (I) por Fredes.
Arbitro: Pablo Lunati.
Cancha: Quilmes.
