El primer paso en la era de Santiago Phelan al frente del seleccionado argentino de rugby, terminó siendo positivo. Los Pumas sufrieron, pero sobre el final lograron derrotar a Escocia por 21 a 15, en un encuentro deslucido, disputado ante unas 30 mil personas en el estadio de Rosario Central. El triunfo sirvió además para ratificar la paternidad del equipo albiceleste sobre el británico, al que ha vencido las últimas siete veces en que se enfrentaron.
El reencuentro de Los Pumas con su gente, después del inolvidable tercer puesto en el Mundial de Francia, fue positivo, pero el nuevo entrenador deberá trabajar durante la semana para mejorar una producción que sólo fue discreta.
El proximo sábado en el estadio 'José Amalfitani', argentinos y escoceces volverán a verse las caras, en el segundo y último test-match de la serie.
La falta de entrenamientos en conjunto quedó expuesta desde los primeros movimientos del encuentro. A Los Pumas les costó coordinar acciones ofensivas, a tal punto que recién sobre los 12 minutos del primer tiempo lograron fijar el juego en campo rival.
En esa primera etapa el que manejó el partido fue el seleccionado visitante, porque dispuso más de la pelota e intentó jugar, pero le faltaron ideas para quebrar una estructura defensiva muy sólida, en la que el conjunto argentino basó gran parte de su triunfo.
Después de que Paterson y Todeschini dejaron el encuentro igualado en 3, mediante sendos penales, Los Pumas lograron hilvanar la mejor acción colectiva de esa primera parte. Una apertura hacia el flanco izquierdo derivó finalmente en la conquista del tucumano Alvaro Tejeda, que despertó a un público ávido de ver rugby, pero que hasta ese momento se había mantenido en silencio. No hubo mucho más en esa etapa, en la que el line argentino fue bastante flojo y la pelota estuvo principalmente en manos de los británicos, que acortaron diferencias con dos penales del casi infalibre Paterson.
En el inicio, el complemento no ofreció mayores variantes con respecto al desarrollo y fue el mismo Paterson, quien con otros dos penales puso a su equipo al frente por 15 a 10.
Recién ahí reaccionaron Los Pumas y el partido se hizo equilibrado, pero siguió siendo impreciso hasta el final. Bernardo Stortoni estuvo cerca de marcar, pero lo sacaron hacía fuera a centímetros del ingoal. Paterson también tuvo su chance de liquidar el pleito, pero falló un penal de atrás de mitad de cancha. Entonces, en los 25 minutos finales, apareció el corazón de Los Pumas que, sin mucho orden, situaron el juego en terreno ajeno. Para eso fue muy importante el aporte de la tercera línea sobre todo del santiagueño Leguizamón y de Juan Fernández Lobbe, además del siempre punzante Felipe Contepomi.
Ese constante ir en busca del ingoal adversario le permitió al equipo argentino descontar a través de un penal de Todeschini, a los 16, y ponerse al frente por la misma vía, cuando restaban 4 minutos para el final del tiempo reglamentario.
Despues Los Pumas aguantaron a puro tackle, tal su costumbre, y en el final liquidaron el partido con una corrida de Gonzalo Tiesi, quien capitalizó una pelota recuperada en tres cuartos de cancha, y selló en la meta adversaria el primer triunfo de esta nueva era.