ECONOMIA
ECONOMÍAS REGIONALES

El año 2023 cerró con consumo de yerba récord, pero crece la preocupación entre los productores

Mientras otros sectores de la economía experimentaron fuertes bajas en su consumo, el de yerba mate aumentó considerablemente. El año pasado se vendieron en el mercado interno 10 millones de kilos más que en 2022, y se espera que la promoción de la actividad por distintas vías siga impulsándola. Pero mientras la actividad crece, los pequeños productores, que son la mayoría, están preocupados por la aplicación del DNU, que deroga una norma que permitía al Instituto Nacional de la Yerba Mate fijar precios mínimos para los yerbateros. La institución, que promueve la actividad, espera la designación de un representante de Nación en el directorio desde el 10 de diciembre.

yerba mate
CONSUMO EN CRECIMIENTO. En 2023 se registró un récord de 325 millones de kilogramos. | Shutterstock

El triunfo de la selección argentina en el mundial de Qatar en 2022 tuvo un efecto inesperado en la economía: impactó positivamente en la venta de yerba, cuyo consumo creció exponencialmente –sobre todo entre los jóvenes– durante el último año. De alguna manera, la yerba mate logró escapar de la crisis de consumo que impacta a casi todos los sectores, y en 2023 registró un récord con 325 millones de kilos, según informó en Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM). El mercado interno fue el principal impulsor: las ventas representaron casi el 88% del total.

Lo cierto es que el consumo viene creciendo en los últimos años. Según explicó a PERFIL Ricardo Maciel, representante del Gobierno de Misiones en el INYM, el principal motivo son las actividades de promoción sobre las propiedades que tiene la yerba y que se impulsan desde el mismo organismo.

Tradicionalmente considerada una bebida consumida por sectores de bajo poder adquisitivo, la yerba mate fue ganando mercados, diversificándose y llegando con distintas opciones a diferentes sectores de la sociedad que hasta hace algunos años no estaban acostumbrados a consumirla, señaló Maciel.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

“Ese fue el principal factor. El otro factor fue el fútbol”, agregó. El hecho de que Messi y los jugadores de la selección se muestren tomando mate impulsó la venta en el exterior y el interés en los adolescentes argentinos, que consumen cada vez más esta infusión.

Por último, el precio también jugó su papel. Al ser una opción más económica reemplazó a otros productos que aumentaron más, como el café.

El Instituto señaló en su último informe que, “a pesar de un contexto climático desfavorable que complicó la cosecha y una caída en la demanda de varios productos de la canasta familiar, la yerba mate se mantuvo firme y cerró el año pasado con una salida de molino hacia el mercado interno de 285.430.373 kilos (casi diez millones de kilos más que en 2022)”.

El triunfo de la selección argentina en el mundial de Qatar impactó positivamente en la venta de yerba.

Según los datos del instituto hace diez años se destinaron al mercado interno 256 millones de kilos, una cifra que se mantuvo más o menos constante hasta 2018 y que creció levemente en los años siguientes. En 2022 se consumieron alrededor de 275 millones de kilos, una cifra que ascendió a 285 en 2023.

“Algo similar ocurrió con las exportaciones, donde las diversas acciones realizadas para consolidar la presencia de la yerba mate argentina en el exigente mercado internacional lograron que los embarques sumen otros 39.691.203 de kilos”, destacaron. Comparada con la cifra de 2022, bajaron levemente: ese año fueron de poco más de 40 millones.

“Siria representa casi el 50% de nuestro mercado, si bien no todo se consume en Siria, sino que también ellos son los que comercializan desde ahí a otros países”, explicó Maciel. “Tuvimos hace tres años una merma muy importante de consumo por la situación de guerra que ellos sufrieron, pero la emigración desde Siria a otros países también hizo emigrar con ellos el hábito de consumo”, continuó.  Después de Siria, el segundo mercado en importancia para Argentina es Chile. “En Estados Unidos y en España hay un potencial muy grande. También en Medio Oriente, que está creciendo mucho”.

Pero, así como el panorama parece alentador aún en un contexto de alta inflación y de baja en el consumo, también preocupa el futuro del sector.

“El 75% de los productores son pequeños y medianos, con pocas chances de negociar frente a grandes empresas que compran su materia prima”, señaló Maciel. El DNU presentado por el Gobierno el 20 de diciembre revocó la posibilidad de que dentro del Instituto se fijen precios mínimos a pagar al productor. En reclamo de un precio más justo cientos de yerbateros de San Pedro, Misiones, organizaron un “tractorazo” el viernes pasado. Actualmente reciben 240 pesos por kilo, una cifra que pretenden llevar a $505 tras el aumento del combustible y la devaluación de diciembre.

2023 registró un récord con 325 millones de kilos consumidos.

 

“Veo un futuro con mucho potencial de crecimiento de la yerba, pero con mucha preocupación de que ese mayor ingreso económico sea bien distribuido en los miles de productores proveedores de la materia prima al quedar expuestos al libre mercado. No existe libre mercado justo cuando hay una posición dominante del sector industrial comprador concentrado y miles de pequeños productores proveedores atomizados”, concluyó Maciel. “La facultad eliminada por el DNU les ayudaba a equiparar poder de negociación en la mesa del INYM”.

La promoción de la actividad seguirá siendo importante para motorizar un consumo en tiempos en los que se prevé una caída de la actividad económica generalizada. Teniendo en cuenta esto, desde el INYM organizaron en Misiones diferentes actividades en las escuelas. “Hicimos un convenio con el Ministerio de Educación por el cual desde el INYM le proveíamos al curso y a cada alumno de quinto año del secundario un kit matero. También preparamos toda una bibliografía relacionada a la historia de la yerba mate con un material de ayuda auxiliar para los profesores”, explicó Maciel. Así, por ejemplo, en historia se puede estudiar sobre cómo las misiones jesuíticas comenzaron a producir y comercializar yerba mate. “Se logró que todo un combo de materias utilizara a la yerba mate como elemento didáctico de trabajo”.

El consumo de yerba es mayor entre los jóvenes universitarios, recalcó Maciel. Por eso también surgieron encuentros como el “Mate Rock”, en donde se ofrecía mate “como bebida energizante para consumir en ese momento”.

Mientras la promoción sigue siendo el principal motor para el consumo, el Instituto Nacional de la Yerba Mate sigue esperando, desde el 10 de diciembre, un representante de Nación para su directorio, conformado por miembros de las provincias productoras y de los distintos eslabones de la cadena productiva de la industria yerbatera en Argentina. El nombramiento de una autoridad que represente al Gobierno nacional es fundamental para el funcionamiento del Instituto de un sector que, a pesar de la crisis, pretende seguir creciendo.