El Banco Central mantuvo este martes en el 40% la tasa de política monetaria y advirtió que en junio hubo una "aceleración adicional" de la inflación, mientras los indicadores muestran "desaceleración" en la actividad económica. Además, el BCRA advirtió sobre "riesgos de mayor inflación a la esperada", si la devaluación se traspasa a los precios minoristas.
"Con todo, se estima que el PBI se desacelere a un crecimiento cercano al 1% en 2018, antes de retomar tasas superiores en 2019", proyectó la entidad.
No obstante, la autoridad monetaria aseguró que seguirá monitoreando la evolución de la inflación para tomar "acciones correctivas en caso de ser necesarias".
"El BCRA mantendrá el actual sesgo contractivo para el impulso monetario hasta que la trayectoria de la inflación, así como las expectativas de los agentes de mercado, se alineen con la meta de 17% en diciembre 2019", indicó en un comunicado la entidad.
Asimismo, adelantó que continuará interviniendo en el mercado secundario de LEBAC para "reforzar la señal de política monetaria".
"Mayores cambios en el marco y el accionar de la política monetaria serán anunciados antes de la próxima decisión relevante, programada para el martes 10 de julio de 2018", informó el Central en el comunicado.
La entidad que ahora conduce Luis Caputo enumeró los motivos que llevaron a mantener sin cambios las tasas y entre ellos mencionó el informe oficial de inflación del INDEC.
"Luego de observar un aumento en la inflación subyacente de mayo, con el IPC del INDEC mostrando una variación de 2,1% para el nivel general, y 2,7% para el componente núcleo, los indicadores de alta frecuencia muestran una aceleración adicional en junio", puntualizó.
Por otro lado, sostuvo que "la misma refleja los efectos directos e indirectos de una significativa inestabilidad cambiaria en las últimas semanas".
"Con una inflación interanual a mayo de 26,3% para el IPC, la perspectiva actual sigue demandando el mantenimiento del sesgo contractivo de la política monetaria", señaló.
Y advirtió que "las expectativas del mercado todavía se encuentran por sobre el objetivo de inflación para el año próximo".
De todos modos, indicó que "los últimos datos disponibles, a junio 22, ya muestran una deflación en la semana previa, y las proyecciones de la subgerencia general de Investigaciones Económicas del BCRA sugieren una desaceleración en las semanas siguientes".
"Con un promedio esperado entre julio y septiembre menor a 2% mensual, mostrando una reducción creciente a medida que nos alejamos del shock de precios de las últimas semanas", aseguró.
Sobre la actividad económica, puntualizó que "siguió mostrando vitalidad hasta marzo, pero indicadores sectoriales de abril y unos pocos datos de mayo muestran una temporaria desaceleración, en parte explicado por el efecto ingreso que la reciente aceleración inflacionaria está generando".
"Por el lado de la oferta, la extraordinaria sequía que padeció el sector agroexportador también es un hecho a resaltar", remarcó el BCRA.
Al respecto, reconoció que "la experiencia reciente sugiere que la actividad económica puede tardar algunos meses más en recuperar su anterior vigor".
Consideró que "el canal de crédito sigue mostrando un crecimiento balanceado, aunque se han notado también los efectos de una transitoria inestabilidad macroeconómica".
"Para los próximos meses esperamos un crecimiento de los créditos bancarios más moderado que en meses previos, también sosteniendo un acomodamiento a una menor demanda agregada", sostuvo.