A pesar de las proyecciones pesimistas de distintos organismos, el Producto Bruto Interno (PBI) registró un crecimiento de 1,3% durante el primer trimestre del año en relación a igual período de 2022, según informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
En términos desestacionalizados, el PBI marcó una suba de 0,7% respecto del cuarto trimestre del año pasado.
En la demanda global se observó un descenso de 0,6% en la formación bruta de capital fijo y una caída de 6% en las exportaciones de bienes y servicios reales.
En tanto, el consumo privado creció 6% en términos interanuales y el público ascendió 1,6%.
Por otra parte, y en relación al cuarto trimestre de 2022, las importaciones crecieron 7,6%, el consumo privado registró un incremento de 2,1%, el público aumentó 2,7% y las exportaciones disminuyeron 13,5%; mientras que la formación bruta de capital fijo tuvo un aumento de 2,1%.
Industria en vilo: macroeconomía y presión fiscal en el centro de la discusión electoral
Por sectores de actividad, se destacaron los incrementos en explotación de minas y canteras (11,9%), hoteles y restaurantes (8,5%) y hogares privados con servicio doméstico (8,2%).
En tanto, el sector pesca marcó un aumento interanual de 4,5% y la industria manufacturera registró una suba en el nivel de actividad de 2,8% con fuertes diferencias al interior de las 16 ramas que lo componen, ya que la industria alimenticia bajó por la menor molienda de trigo y procesamiento de soja, pero aumentó la siderúrgica, vinculada al desarrollo de Vaca Muerta.
En cuanto al comercio mayorista, minorista y reparaciones, este tuvo un incremento de 2,7% interanual.
Por su parte, el sector de Agricultura, ganadería, caza y silvicultura cayó 11,9% interanual debido principalmente a la sequía.
“Algunos pensaban en una mayor caída en el nivel de actividad, pero apareció un nuevo tractor, que es Vaca Muerta, que no sólo impacta en Neuquén, sino en toda la cadena de valor”, afirmaron fuentes del Palacio de Hacienda a Télam.
Miradas menos optimistas
"Se proyecta que la producción en Argentina caerá 2% en 2023 y luego crecerá 2,3% en 2024, a medida que la economía se recupere de la mayor caída de este año", había señalado el Banco Mundial.
En tanto, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) estimó que la economía argentina caería 1,6% en 2023.
La economía argentina sufrirá la mayor caída entre todos los países de la OCDE
En contraposición, el Fondo Monetario Internacional (FMI) se mostró más optimista y aún proyecta un crecimiento del 0,25%.