Los datos negativos del efecto de la sequía no se han dejado esperar, por eso los números muestran que el procesamiento industrial de la soja en Argentina cerró el 2022 con una baja del 10%, según los datos de la Bolsa de Comercio de Rosario. Y esto, sin considerar el complejo panorama que se espera para el poroto en la inminente campaña 2022/23, cuando todos los pronósticos indican que se profundizará la tendencia bajista del año pasado en la molienda de soja del Mercosur.
Para tener el número a mano, vale considerar que ya en 2022 la participación argentina en la industrialización del bloque económico fue la segunda más baja desde 1998.
Y ahora se suma otro dato. Que por el bajo crushing, Argentina podría perder en manos de Brasil el liderazgo tras más de dos décadas como el principal exportador de harina de soja.
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El informe de la Bolsa de Rosario alerta sobre el tema, al explicar que "la merma en los volúmenes de molienda deja a la Argentina con una creciente capacidad ociosa. "Siendo el país de mayor volumen potencial de procesamiento del Mercosur y uno de los más importantes del mundo, en 2022 la industria aceitera trabajó a la mitad de su potencial productivo", indicaron.
Y agregan que "la ociosidad de la industria argentina duplica a la de Brasil en términos relativos, en buena parte por un volumen insuficiente de materia prima". Además, el informe elaborado por Guido D'Angelo y Emilce Terré explica que "si bien parte de esta caída es compensada con importaciones de soja del Mercosur, los márgenes de procesamiento también son un asunto a tener en cuenta, ya que su bajo nivel actual limita la industrialización de la soja argentina".
La cosecha y lo que se espera
La última encuesta entre productores CREA realizada en marzo pasado refleja un panorama complejo ocasionado por las importantes pérdidas productivas y económicas a las que deberán hacer frente las empresas agropecuarias.
En cuanto a las previsiones sobre la soja de primera, en el promedio nacional se prevé lograr un rendimiento 41% menor al planificado al inicio de la campaña, mientras que esa proporción crece hasta el 49% en el caso de la soja segunda, cultivo que resultó muy afectado por una inédita helada temprana registrada en el mes de febrero.
Cabe destacar que en la región CREA Centro (que comprende el sur de Córdoba y este de San Luis) más del 80% de las empresas sufrieron daños por esa helada.
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Otro dato negativo, en especial si se lo mira a futuro, expuso que un 62% de los encuestados consideró que la situación económica del país podría desmejorar dentro de un año, mientras que otro 40% estimó que en ese mismo lapso los indicadores económicos y financieros de las empresas que gestionan experimentarían un deterioro.
Como era de esperarse, ese panorama desmotiva el desembolso de fondos de cara al nuevo ciclo. En ese marco, un 53% de los empresarios CREA consultados manifestó que no está considerando realizar inversiones en el presente año.
Para evidenciar que ya se está viendo un freno de actividad, según dato de la Bolsa de Rosario, la semana pasada ingresaron en promedio 811 camiones por día, un 83 por ciento menos que los que entraban en la misma fecha del año pasado.
Crushing, harina de soja y un liderazgo que se pierde
Hace 25 años que el país tiene un récord importante, el de ser el principal exportador de harina de soja y es relevante en tanto se trata de exportaciones con agregado de valor.
Sin embargo, este año Argentina podría perder esa posición justamente como efecto de la menor cosecha.
"El que desbancaría a Argentina como primer exportador mundial de harina podría ser Brasil, con la paradoja de que la estructura industrial brasilera no está tan enfocada a la exportación como la argentina", explicó Guido D'Angelo y agregó. "Eso, a diferencia del Up River, donde concentramos en el Gran Rosario el 80% de la capacidad de procesamiento de oleaginosas de nuestro país".
A pesar de eso, la cosecha récord de Brasil le permitiría abastecer tanto a sus mercados cárnicos (usan la harina de soja fundamentalmente para la elaboración de productos de alimentación animal), así como exportar niveles crecientes de harina, en este año por primera vez por encima de Argentina en décadas.
Como dato positivo, el informe de la Bolsa de Rosario señala que Argentina aún mantiene robustos estándares de eficiencia y un tamaño de planta muy superior al promedio del Mercosur.
"Mientras la media productiva diaria por planta en Argentina supera las 5.300 toneladas, en Brasil se ubica en 2.300 toneladas. Más lejos aún están Paraguay y Bolivia, con promedios en torno a las 850 y 1.300 toneladas, respectivamente. Asimismo, mientras la planta más grande en Argentina puede procesar 30.000 toneladas de soja por día, la más grande Brasil se ubica en 6.500 toneladas", indicaron.
