El gobierno argentino lanzó el Plan Gas 4 con el objetivo de asegurar inversiones en producción de gas natural. El plan apunta a fijar reglas claras y estables por varios años, junto con un mecanismo de competencia, para que las empresas productoras de gas hagan propuestas de inversión y reviertan la tendencia declinante de la producción.
Luego de un pico de producción cercano a 140 millones de m3/día, la Argentina ingresó en curva decreciente hasta llegar a menos de 100 millones m3/día. Ese menor volumen obedece fundamentalmente a la falta de perspectivas futuras, que demoró decisiones de inversión en el sector. A diferencia de décadas anteriores con producción convencional con declinos lentos, hoy, con producción creciente de Gas No Convencional, el impacto de la falta de inversiones se deja ver en pocos meses.
El Plan Gas es una buena noticia. Con este conjunto de reglas, discutidas y consensuadas por Gobierno, empresas y muchos actores de la industria, se invita a empresas argentinas y extranjeras a invertir en nuestro suelo, generando trabajo, valor agregado y desarrollo. Si la convocatoria es exitosa, se esperan propuestas que aseguren un piso de 70 millones de m3/día todo el año. Se abastecería así la demanda local de gas para el segmento residencial y el de generación térmica, además del industrial, que podría requerir otros 30/40 millones de m3/día en promedio año.
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Un capítulo importante es el fomento a la exportación de excedentes de gas. La Argentina ha sido pionera y líder en exportar recursos energéticos. Contamos con una red de ductos muy importante que nos permite ofrecer gas y energía competitivos y sustentables a nuestros vecinos. Nuestro país debe recuperar ese rol y esos mercados, para asegurarse el ingreso de divisas y una industria energética fuerte, dinámica y resiliente.
El caso de Brasil, por sí solo, nos permitiría duplicar las exportaciones actuales de gas. Por estos días la Argentina exporta energía eléctrica a Brasil, usando toda la capacidad de transmisión disponible. Podríamos agregar, sin inversión ni demora, la exportación de 2,5 millones de m3/día de modo inmediato, colaborando en la necesidad de energía segura, competitiva y sustentable con nuestro principal socio del Mercosur, severamente afectado por el fenómeno La Niña. Y, con esta exportación, traer de inmediato las divisas que la Argentina tanto necesita.
*Presidente de SAESA