Frente a la ciudad de Paraná, a solo 300 metros de la capital de Entre Ríos, el islote Curupí invita a subirse a una canoa o un kayak para desembarcar en esa Área Natural Protegida, recorrer sus diferentes senderos desde donde observar la flora y fauna local en compañía de guías y adentrarse en relatos históricos que lo tuvieron como escenario.
La visita brinda la posibilidad de acercamiento al ambiente isleño, promoviendo su disfrute y la contemplación de sus paisajes y riquezas. Además, está orientada a un fin educativo, para la preservación del patrimonio natural y cultural existente.
Contingentes de estudiantes, vecinos y turistas que llegan a Paraná recorren el islote durante todo el año, con unos 600 arribos mensuales. Los servicios de traslados son realizados por prestadores turísticos ubicados en el muelle de excursiones náuticas de la costanera.
El islote -en el tramo medio-bajo del Paraná- forma parte de los imperdibles de la Ruta del Litoral y Grandes Ríos, una de las diecisiete que integran La Ruta Natural del Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación, que brindó apoyo económico a la Municipalidad de Paraná, en el marco de su programa Municipios Turísticos Sostenibles, para poner en valor ese Área Natural Protegida.