Cansado de sufrir hechos de inseguridad (29 en total), un médico (Dady Brieva) crea una trampa para ladrones utilizando su camioneta importada como señuelo. Ciro, el “chorro” que camina canchero con zapatillas deportivas, pelo teñido, y remera de Boca, muerde el anzuelo y termina encerrado tras lograr su cometido. Un encierro que se convierte en un secuestro, en una cárcel con dosis de tortura y sadismo. Justicia por mano propia. Eso propone Mariano Cohn con 4x4, película que llegará a los cines el próximo jueves, y que muestra a un Peter Lanzani que regala matices actorales y entrega física que dejan al espectador asfixiado. A sus 28 años, tras trabajar en El clan, Solo se vive una vez y El ángel, será el primer protagónico de Lanzani en el séptimo arte. “No pienso en que soy el protagonista exclusivo, me importa en cómo llevar la historia. ¿Qué es el éxito? No existe formula, he visto películas malísimas que llevan gente y películas buenísimas que no vio nadie. Yo entrego todo, ensayo, me sé la letra, estoy temprano en el set, pero no me contrates por si te voy a llevar gente al cine”, afirma Lanzani.
—¿Tenés expectativas con esta película?
—Sí. Cuando la vi me dio una sensación de tranquilidad, porque siento que el laburo ya está, cumple con las expectativas…todo lo que venga ahora es un poco de yapa. Si le va increíble, está buenísimo.
—¿Qué tienen de atractivos los policiales?
—Es un género que da tensión, y tal vez el morbo que tiene la gente. La realidad no es tanto el género, es el golpe de realidad, y creo que la película te parece una historia conocida. Y hoy la gente quiere ver eso, miran muchas series, no se comen ninguna, se dan cuenta si son buenos o no, tengo amigos de mi club de rugby (Alumni) que trabajan en la Bolsa y me hablan de fotografía.
—¿Cómo ves la Justicia argentina?
—No te lo sabría decir con exactitud, pero claramente la inseguridad es algo que está muy claro en Argentina: hay miles de zonas liberadas, miles de quilombos por todos lados, roban por donde sea, te cagan matando por un celular. Es border, es difícil. No creo en la Justicia por mano propia, y tampoco que sea la solución al problema.
—Con más del 30% de pobres, ¿se puede solucionar la delincuencia?
—Y, es muy difícil. La gente ya sale a robar no por una cuestión de marginalidad, necesita comer algo… No digo en lo más mínimo que sea la solución, ni el motivo de matar y robar. Ahí ya entramos en una rama política donde no tengo ni la más mínima idea.
—¿Salís con miedo de tu casa?
—No ando con miedo por la vida y no he tenido hechos de inseguridad a mano armada. Me robaron cosas del auto y sentís impotencia porque te roban cosas que ni siquiera se pueden vender. De última llevate algo que puedas vender y alimentar a tu pibe.
—¿Y la pena de muerte?
—¡Qué sé yo!, es muy border. Depende de las situaciones, va muy de la mano con la justicia por mano propia. Una persona que decida sobre la vida del otro…no lo sé, siento que… no lo sé. Claramente no tenemos el mismo estilo de gente en Estados Unidos que acá, no lo sé. Pero no estamos preparados para aplicar pena de muerte.
—¿Y para el aborto?
—Yo creo que está haciendo su camino, estoy a favor en situaciones de violaciones sin lugar a dudas. Habrá que seguir formulando el cómo, qué tipo de situaciones y todo, pero yo creo que está haciendo su camino el aborto, tiene que seguir su debate. Quizás un no ahora, no quiera decir un no rotundo. O sea que ya se haya charlado tanto y debatido tanto, me parece que es un avance.
Hombre de equipo. Peter Lanzani lleva la filosofía de ex jugador de rugby a su vida artística: es más importante el equipo que el jugador. Valora el trabajo realizado con el team de 4x4 y destaca a Kiko de la Rica, director de fotografía que trabajó con Alex de la Iglesia. “Usamos tres camionetas, porque se va rompiendo y había que buscar el mejor lugar para la cámara. Y no fue en una calle de la Ciudad sino en Estudios Baires (de Adrián Suar, allí se graba Argentina: tierra de amor y venganza). Y fue muy grosso el laburo del vasco Kiko”. Peter cuenta que decidió tener un mánager por primera vez en su carrera y eligió a Javier Braier (productor ejecutivo de K&S) para el puesto.
El cable a tierra de Peter son su familia y amigos. “Estoy soltero, tranqui, concentrado en el laburo. Soy cero cerrado al amor, porque a mí me gusta estar enamorado por así decirlo, creo que una pareja te hace una mejor persona, porque te da una felicidad extra sin tener que andar haciendo. Una charla, un simple mensaje, pero bueno por ahora no sé está dando. Yo creo que va a llegar, esas cosas no se buscan, suceden”. Asiste mucho al cine, y a ver bandas como Los Vándalos Chinos, El Mató... y Usted Señalemeló. Está por terminar de leer Crimen y castigo de Dostoievski. “Extraño jugar al rugby, veo a mis amigos y me quiero morir, pero tengo un contrato. No puedo. Mirá si me rompo una pierna y había firmado para hacer 4x4”.
—¿Irías al “Bailando”? ¿Bailás bien?
—No. Pero creo que me podría defender, me gusta bailar, pero no es el punto del eje a donde estoy llevando mi carrera sin lugar a dudas.
— ¿Tinelli en política?
—Mirá, soy pésimo en política. Pero en política, estamos tan acostumbrados a que los políticos sean políticos que no lo sé. El como figura es una persona importante, no lo curtí mucho, lo vi una sola vez, y no sé si tiene idea de que existo. Lo que hizo con el fútbol me gustó muchísimo, teniendo amigos cuervos como Soffritti.
Un gallo para Peter. “Todos tenemos ganas de hacer la tercera, Bruno (Stagnaro), Ariel (Staltari), Underground, pero es una serie difícil de hacer, que rompió todos los moldes, fue cine para televisión, y Bruno tiene sus tiempos, dependemos de mil cosas, ojalá haya una tercera parte”, dice Lanzani, quien interpretó a Nelson, un misionero convertido en capanga del Conurbano. Sobre El marginal dice que con “Nico (Furtado) tiramos la idea de cruzar los mundos, un cameo, pero no depende de nosotros. Sería lindo cruzar Un gallo con El marginal”.
Barcelona y Nápoles por Maradona
Peter Lanzani tiene un papel muy importante en Sueño bendito, la biopic de Diego Maradona que se verá por Amazon Video. Lanzani interpreta a Jorge Cyterszpiler, representante y confidente del Diez, donde ya grabó escenas en la casa de la familia Maradona en Devoto (“es uno de los personajes que no se sabe mucho”), y este lunes volverá a ponerse la peluca con rulos para continuar con las grabaciones. “También voy a grabar en Barcelona y en Nápoles”, anticipa el actor que en Buenos Aires graba con el Maradona de Nicolás Goldshmidt y en Europa lo hará con el Maradona de Nazareno Casero. “A Diego no lo conozco, sí te puedo decir que lo vi una sola vez en mi vida en el Partido por la Paz del papa Francisco, y lo saludé. Yo había ido a acompañar a Tini (Stoessel, su ex novia) que cantó ese día”.
Cyterszpiler tuvo poliomielitis y le quedó una secuela en su pierna derecha. “Compongo la renguera sin nada, y también uso muletas”, revela Lanzani y dice que vio algunos videos y que no tuvo contacto con la familia del ex representante de Maradona.
Peter Lanzani suele mixar entre lo comercial y los rincones del off. Confiesa que por Matadero, obra de gran compromiso físico y psíquico, adelgazó un par de kilos y levantan telón cuando encuentran sala como el próximo miércoles en el Centro Cultural Freire. Comenta que pronto volverá a hacer funciones de El emperador Gynt.
“Me gustó Argentina: tierra de amor y venganza. Está Baró, muy buen actor. La China y Gonza (Heredia) están muy bien. Está bueno que se sigan haciendo ficciones nacionales así, que se arriesgue, porque el que no arriesta no gana. Tengo amigos también laburando ahí, Mati Mayer…”, responde y confiesa que Adrián Suar lo convocó para ATAV, pero su agenda lo impedía. “Me ofreció hacer el personaje de Heredia o Benjamin, no me acuerdo bien”.