ESPECTACULOS
Detras de los microfonos

Intimidad de un clásico entre amigos

PERFIL compartió una emisión del programa de Metro FM 95.1 con la mayor audiencia en su franja horaria (13 a 17) desde hace casi 19 años. Uno de sus secretos es que no hablan con políticos ni dirigentes de fútbol.

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Aire. Matías Martin, el viernes 25 de octubre, mientras conducía Basta de todo. Juan Ferrari, Malena y Emilse Pizzaro en la mesa chica. Rose Bouzón, y Waty Frignani en producción. | Nestor Grassi

Matías Martin, sentado en el centro del estudio Fernando Peña, y frente a la cabina de control, abre la tablet y entra en el sitio The New York Times. A su izquierda, Malena Guinzburg, la incorporación 2019, es la cebadora oficial de mates. La humorista y actriz estira su brazo y le comparte un amargo al locutor Diego Ripoll –ubicado a la derecha de Matías–, quien scrollea el home de La Nación. Juan Ferrari completa el póquer radial previo al inicio de la jornada. Sobre la mesa hay lapiceras, un paquete de yerba, el termo, billeteras, celulares, papeles y alfajores de maicena caseros. Están listos para una nueva emisión de Basta de todo, el programa más escuchado en la franja horaria 13 a 17 desde hace 19 temporadas, y que por primera vez abre las puertas de su “hogar radial” a PERFIL para vivir una emisión completa del exitoso ciclo de FM Metro 95.1. El clima relajado y descontraturado que se oye al aire es parte de la atmósfera instantes previos al cartel de “Aire”. “Acá hay risa, que es lo que más nos pide y agradece la gente, hay emoción y hay cabeza, esas tres cosas nos preservan y nos mantienen arriba”, le dice Matías Martin a PERFIL durante el primer corte.

No es el único secreto de Basta de todo. Los productores Waty Frignani y Tomás Druetta revelan que profesan dos mandamientos radiales: “No entrevistarás ni les darás espacio a los políticos” y “No entrevistarás ni les darás espacio a dirigentes de fútbol”. Juran que varios políticos importantes –prefieren no dar nombres– se mueren por estar y se postulan para visitar el estudio de calle Freire 932. “La actualidad política la tocamos en la ronda de noticias, donde Matías y la mesa editorializa. No les tememos a los temas políticos, acá no hay miedos, y cuando fue lo del aborto se invitó a abogados y especialistas para que hablaran del tema”, cuenta Druetta.

Las noticias que tocan en la sección “La agenda de Basta” están seleccionadas por la productora Emilse Pizarro –forma parte de la mesa– con el aval de Matías Martin. “A las 8 empiezo a peinar todos los medios, gráfica y web: Clarín, PERFIL, La Nación, Infobae. Hago un recorte de actualidad mucho más enfocado en cosas que tocan a los oyentes, desde aumentos, inflación y demás. No nos interesa Lebac, lo vemos desde la óptica de un consumidor más”, subraya Pizarro.

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En Basta, la organización y comunicación es muy importante. Frigani revela que tienen cinco grupos de WhatsApp. “El de los productores, Basta Producers; el del equipo completo, Basta 2019; el de la mesa, Basta Segundo Contenido, y los dos más importantes: Basta Comida, porque ahí hablamos sobre qué vamos a almorzar en la reunión de producción antes del prorama, y Futbol de los Jueves, ya que a la salida de la radio jugamos en un colegio de acá a la vuelta”. Mientras el programa sigue al aire, y el columnista Dany Miche entra a la cancha de Basta, del otro lado del vidrio cuentan que Matías en los partidos “es el goleador, el que tira caños y magia, por eso si el partido está picante le vamos fuerte”. Repartir los viajes en un equipo tan numeroso queda en manos de Matías, como fue el caso del Lollapalooza de Chicago 2019. “Matías es un buen repartidor, es justo, somos muchos, y generalmente viajan todos los de la mesa más dos productores que nos vamos turnando”, dice Druetta.  

Basta de todo tiene tandas de 11 minutos y varios PNT de marcas premium. “Es muy  redituable, se mantiene todos los años, le va bien, la pauta está buena, me encanta que así sea, pero también puede ahuyentar oyentes”, dice Martin y confiesa que ser líder de audiencia “te da tranquilidad, porque si midiéramos mal vendrían a correrte con eso. Cuando medís bien, nadie te dice nada; cuando medís, mal: “Eh, hay que cambiar todo”, y prefiero que el programa tenga la pulsión nuestra, la de ver qué nos gusta, para dónde vamos, qué incorporamos, y tomar las decisiones que a veces acertamos y a veces no”.  

Basta tuvo cambios este año. Decidieron que Cabito no continuara en el ciclo y sumaron al staff a Malena Guinzburg. “En tiempos de feminismo, de cambios, creo que Basta es el programa radial que más se adaptó, se deconstruyó, me sumé yo, están Emilse y Rose (Bouzón, encargada de redes) que hacen aire. Antes se hacían y se decían cosas que ahora a ellos tampoco hoy les causarían gracia, toda Metro en sí está deconstruyéndose”, remarca Guinzburg. Sobre las paredes del estudio está bien grande el 144 para atención a víctimas de violencia de género. “Antes éramos un vestuario de un equipo de fútbol, cambió la configuración, vino bien el cambio de aire y el ingreso femenino nos hizo mejores”, suma Matías.

A esta altura del año, los capos de las radios negocian la continuidad de los conductores y programas para el año que viene. Matías y el resto del equipo tienen una excelente relación con Andrés Pandiera, director artístico de Metro, sin embargo todavía no está cerrado 2020 y es una incógnita. “No se sabe, tenemos contrato hasta fin de año, no está cerrado, está durísimo el país, la situación, está durísimo el esquema de medios, las radios, y esta radio no es una negociación fácil, pensé que era sencilla, me acerqué con una propuesta superfácil como para firmar instantáneamente y no les pareció. Hablamos una vez. Nunca se sabe”. ¿Y te imaginás vivir sin radio? “No me lo imagino pero podría, no lo deseo, pero puede pasar, cumplí 49 años, y hay una reconfiguración, un reseteo, y es momento de pensar. Tampoco me cierro a tener mi propia radio, ¿por qué no?”.

Este detrás de micrófono sucede el viernes 25 de octubre previo a las elecciones y, como en cada cierre de semana en la apertura de Basta de todo, cada uno de los integrantes levanta una copa imnaginaria y hace un brindis por lo que quiera. Matías Martin termina la ronda y reflexiona sobre la importancia de la democracia. ¿Qué país creés que se viene, Matías? “Yo creo que vienen dos años duros, independientemente de quién gane, vienen dos años, no quiero decir cuatro. Estos cuatro años fueron terribles, y los dos que vienen son duros también pero la posibilidad de votar es renovar también las esperanzas. Hace cuatro años había como un deseo de cambio muy grande, y ahora yo siento que también hay un deseo de cambio muy grande, vamos a ver qué es lo que sucede pero lo que es seguro es que, gobierne quien gobierne, son dos años difíciles y la verdad es que cansa, el acumulado de ‘siempre estamos en medio de una crisis’ es un poco cansador”.

 

A la espera de ‘Su’ y charly

Al equipo de Basta de todo mencionado hay que sumarle a los productores Marcos Maqueda, Gonzalo Conti y Leandro Navarro, y los columnistas Luciano Banchero, Javier Zucker, Juan José Becerra, Santiago Bilinkis, Marcos López, Juan Sklar, Fiorella Sargenti y Diego Angeli. “Si bien tenemos a los mejores, te confieso que una vez le eché el ojo a Martín Lousteau y Andy (Kusnetzoff) me ganó de mano”, revela Matías Martin.
 Basta de todo ganó cinco Martín Fierro de Radio y este año tiene a Diego Ripoll nominado en Labor Conducción Masculina. “Compito con Lalo (Mir) y Albornoz , que son dos de mis maestros y referentes, ya es estar en el olimpo de los locutores, aunque la esperanza nunca se pierde”, dice Ripoll, que ya obtuvo un galardón en 2017. “Todas las áreas de Basta están premiadas: producción, Matías en conducción, y que el programa no esté nominado no nos quita el sueño, el mayor premio es estar al aire y que la gente nos elija”.
Las cuentas pendientes son las visitas de Charly García y Susana Giménez. “Tuvimos a Cerati, Darín, Seba Ortega, Francella, Spinetta, Santaolalla, Calamaro, que antes de fin de año seguro viene, pero a Susana, por ejemplo, la estamos negociando con Manuel, su nieto, y siempre nos dice: “Dentro de dos meses hablamos”, y cuando le escribimos la patean. También es una cuenta pendiente Gaby Sabattini”, dice Tomás Druetta.  A Malena Guinzburg le encantaría que su padre, Jorge, la viera en este presente: “Obvio que me encantaría compartir aire radial con él, creo que estaría feliz por mi presente en la radio y en stand up”.
En un corte, Matías desbloquea su celular y empieza a ver el home de Instagram. “Lo tuve privado, para guardar las fotos, en el Mundial me convencieron de que lo hiciera público, solo me seguía mi mujer (Natalia Graziano), me fui soltando de a poco y este año en Barcelona me animé a subir foto de mis hijos con Messi, otra en la Sagrada Familia, y después una con mi vieja.  Twitter lo abandoné por la agresión”.
¿Hay grieta en Basta? “No,  no pensamos todos igual pero no genera conflictos, y por ahí en fútbol hay más chicanas”, finaliza Juan Ferrari.