ESPECTACULOS
Marcelo Zlotogwiazda

“No obedezco a ninguna línea”

El periodista abandonó enojado Del Plata y se pasó a Radio Diez. Asegura que los profesionales con trayectoria no reciben presiones de los gobiernos ni de los dueños de los medios.

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Marcelo Zlotogwiazda | Cedoc

Después de algo más de cuatro años, Marcelo Zlotogwiazda dejó Del Plata. Su partida se suma a las de Gustavo Sylvestre, Darío Villarruel y Alejandro Dolina, y salvo éste último que migró a la 750, todos encontraron destino en Radio 10. “Me recibieron muy bien. La radio tiene mucho mejor equipamiento y alcance que Del Plata. Varios oyentes me hicieron notar que se escucha mejor”, asegura. La vuelta de Zloto va de 17 a 20 y de la formación de la AM 1030 sólo queda Sebastián Lacunza.

—Radio 10 se benefició de la caída de Del Plata. ¿Tenés un pantallazo de la migración de oyentes?

—No, pero eso pasa siempre. Todo programa de radio tiene un núcleo que sigue al conductor o al ciclo en general. No sé en qué medida, pero seguro va a pasar.

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El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
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—¿Cómo fue tu salida de Del Plata?

­—Muy enojado, con mucho atraso en los pagos, en medio de comportamientos empresarios que me molestaban dentro de una radio que veía desmoronarse. Ahí apareció la oferta de Radio 10 y se dio todo de manera muy veloz. Supongo que habrá un juicio por la deuda acumulada. Me apena porque era una radio que quería. Valoro mucho la continuidad. Hubiese querido quedarme en Del Plata y    que la radio mantuviese el buen rumbo que tenía.

—¿Por qué se desmembró?

—Por sobre todo está la impericia de los dueños para manejar un medio de comunicación. No están preparados para manejar una radio. Vienen del mundo de la construcción y la obra pública. No entienden de medios. Después entraron en la lógica de una radio que acumula deudas y problemas financieros, y decidieron que no querían aportar más.

—¿Qué te generan los medios que se sostienen en base a subsidios?

—Acá había derivación de ganancias de otro negocio. Si no es sustentable el medio en sí, corrés el riesgo de que cuando el otro negocio deja de darte excedentes vas rumbo al cierre o la quiebra, que es lo que pasó en Del Plata. Ahora, si soy un empresario muy exitoso en un rubro y decido que con parte de mis ganancias quiero tener una radio, porque me hace feliz o contribuyo a un modelo político, es legítimo… siempre y cuando se cumplan las leyes. A ver, se les desinfló el otro negocio y no lograron transformar a la radio en algo sustentable, con el agravante de haber podido hacerlo. La radio comenzó a acumular deudas e incumplimientos muy graves: sueldos, obras sociales y pagos impositivos.    

—¿Volverías a trabajar en una radio con esa matriz?

—Si hay condiciones laborales que me satisfacen, sí. Siendo consciente del riesgo. Hoy por hoy, no sé cuántos medios son sustentables sin el apoyo de negocios paralelos u otros medios.

—Estás en una radio dentro de un grupo económico, que además tiene su grupo de medios…

—Como decís, es un grupo de medios. Da la impresión de tener más espalda. Es de público conocimiento que el Grupo Indalo tiene negocios muy importantes más allá de los medios, pero como lo tienen otros medios.

—Algunos periodistas afirman que trabajan con más libertad con este gobierno...

—En mi caso eso no corre. La gente que tiene cierta trayectoria no recibe llamados de los dueños de los medios ni del Gobierno. Por supuesto, tengo contacto permanente, pero no obedezco a ninguna línea. Trabajo desde mi casa, voy a reuniones con empresarios, políticos y funcionarios, no estoy en una redacción, no vivo en ese ambiente. Llego al programa una hora antes, lo hago y me voy. No me parece que haya más libertad ahora que antes, no creo que haya algo sustancial. Sí probablemente los funcionarios estén ahora más abiertos. En cuanto a presiones, no. Presionás a quien se deja.


El amigo Ernesto

Desde que TN empujó al final de Palabras más, palabras menos, se quebró la dupla que formaba junto a Ernesto Tenembaum. Zlotogwiazda se mudó a C5N, pero Ernesto decidió no acompañarlo. Sin embargo, la relación personal quedó intacta. “Somos amigos y nos hablamos todas las semanas. El no tuvo ganas hace dos años de sumarse a ese proyecto, pero no pasa nada”, asegura el conductor de Desafío 20.17, ciclo en el que al igual que la radio conserva su estilo reflexivo. 

—Pasaste por casi todas las señales y radios líderes. ¿Cambió la dinámica de trabajo de tu época en Mitre para acá?

—No lo noto… Quizás la presencia de redes sociales, pero eso es una obviedad en el trabajo del periodismo y del mundo laboral en general. Cambia el contexto y el país, la profesión no. La encaro con la misma lógica de siempre.

—¿Cuántas diferencias ves entre el modelo económico pasado y el actual?

—Hay enfoques distintos, de naturaleza de pensamiento. Darle a Sturzenegger la libertad de establecer la política monetaria es claramente una diferencia con el gobierno anterior. El gobierno actual tiene muchos condicionamientos políticos para hacer lo que realmente querría. Están convencidos de que el modelo que ellos pretenden para el país van a establecerlo de manera gradual. Uno no termina de saber bien cuál es el fin último. Salvo la del blanqueo, las apuestas que hicieron no les salieron bien. El balance no es positivo.