Uno de los grandes ensueños de la humanidad ha sido siempre la eterna juventud. Si bien no podemos detener el reloj, la medicina Age Management avanza para conseguir que no sólo vivamos más sino también con mejor calidad de vida. El proceso de envejecimiento comienza a partir de los 35 años y continúa de manera más evidente a partir de los 40 años.
Desde el punto de vista científico, es el resultado del daño celular y subcelular que se produce con el paso del tiempo. Sus síntomas se manifiestan entre 10 y 15 años antes de aparecer la enfermedad, restándole años a nuestra vida y reduciendo nuestra energía y bienestar. Esta es la misma causa de la aparición de las enfermedades relacionadas con la edad, como las cardiovasculares, la diabetes, el cáncer, neurodegenerativas, demencia, Alzheimer, Parkinson, osteoporosis y artrosis; principales causas de muerte en la sociedad moderna.
Se relacionan en parte con nuestros genes y en parte con nuestra relación con el medio ambiente y hábitos de vida (estrés, alimentación, ejercicio, etc.) pero aún más importante es el declive de una serie de biomarcadores metabólicos y hormonales en sangreque llevan al deterioro celular y subcelular. Según investigaciones de la Universidad de Yale, la esperanza de vida se ha incrementado unos 30 años entre el siglo XX y el siglo XXI, principalmente debido a la evolución de la ciencia médica y de sus tratamientos para las enfermedades, así también como la concientización hacia una vida saludable.
Sin embargo, de esos 30 años, solamente 18 meses serán de vida saludable. Esto significa que durante 28 años y medio estaremos vivos, pero sufriendo de alguna dolencia o enfermedad crónica, sin plenitud de vida. Este es el reto de la Age Management Medicine: ayudar a los individuos a que los años de vida sin enfermedades, plenos de vigor y buena calidad se extiendan lo más cerca posible al número total de sus años cronológicos.
Este es el paradigma médico del siglo XXI, la salud preventiva. Esta Medicina se basa fundamentalmente en la biología Telomérica. Los telómeros son esenciales para proteger los cromosomas, que guardan nuestra información genética, desde el color del pelo hasta cuál será la enfermedad que nos llevará a la muerte.
Se podrían comparar con los extremos del cordón de un zapato, que lo protegen para que no se deshilache. Con cada duplicación celular, estos se acortan de a poco hasta llegar a una longitud crítica en la cual ya no pueden proteger esa información, siendo esta la principal causa del envejecimiento. Ya no debemos resignarnos a los síntomas del envejecimiento solamente por haber cumplido más años. Ahora se pueden frenar y hasta revertir.
La Dra. Marcela Young, médica pionera en “Age Management Medicine” en Estados Unidos, España y Argentina, inaugura su consultorio en Buenos Aires en junio 2019.
Para contacto: Av. Santa Fe 1979 6º B. Tel: +54 11 2107 1626.
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