Ninguno de los 1.500 jóvenes que escuchaban el recital de la banda californiana de heavy metal Eagles of Death Metal presuponía que los disparos taparían los acordes en Bataclan.
Las imágenes muestran al público segundos antes de que irrumpieran los terroristas de Estado Islámico con sus kalashnikovs para causar uno de los atentados que cubrieron a París de sangre.
Los primeros estruendos de las metralletas generaron incredulidad. Pensaban que era parte del espectáculo. Los yihadistas abrieron fuego contra la multitud y luego subieron a la galería del primer piso.
Por otra parte, uno de los nuevos propietarios dijo que la sala de conciertos el Bataclan, que ya había sido amenazada en el pasado, volverá a abrir en una fecha todavía por determinar. "Esta sala no cerrará nunca", afirmó en declaraciones emitidas este domingo por el canal BFM TV, Dominique Revert, uno de los gerentes de la productora Alias, que es copropietaria del Bataclan.
"En cualquier caso esta sala va a abrir para espectáculos", señaló Revert, quien a su vez aclaró que no sabe por qué los yihadistas habían decidido atacar el lugar, que se encuentra cerca de la plaza de la República.