En plena hora pico, un atacante generó pánico entre los pasajeros en la parada de Parsons Green de la línea District (verde), al oeste de la ciudad.
Si bien se sabe que los servicios de emergencia tuvieron que actuar con rapidez para atender a una gran cantidad de personas, aún no se pudo determinar si los heridos fueron a causa de la "explosión" o de la estampida que produjo el temor del ataque.
"Por el momento sabemos que varias personas sufrieron heridas en una explosión en un tren que estaba detenido en la estación de Parsons Green”, confirmó la policía en un comunicado. "El subcomisario Neil Basu, principal coordinador nacional de contraterrorismo, lo declaró un ‘suceso terrorista’", añadió, luego de pedirle a la gente que evite la zona.
De acuerdo con los videos y las fotos publicadas por los testigos en las redes sociales, se podía ver un recipiente de pintura ardiendo. El balde estaba dentro de una bolsa de plástico y de él salían unos cables.
La estación de Parsons Green está en el sudoeste de Londres, en el barrio de Fulham, una zona de clase media-alta.
De acuerdo con la agencia británica Press Association, un testigo vio a muchas personas heridas, pisoteadas en la estampida que siguió al incidente, pero que no creía que el estallido de la bolsa hubiera herido directamente a alguien.
"Había una mujer en el andén que dijo haber visto una bolsa, un fogonazo y un estallido, algo había obviamente explotado", aseguró el testigo.
El Reino Unido ha sufrido cinco atentados desde el 22 de marzo y vive en estado de alerta. En la escala de amenaza terrorista de las autoridades, el nivel es el segundo más alto, "severo", que significa que un atentado es "altamente probable".
El ministro de Relaciones Exteriores Boris Johnson, el primer miembro del gobierno que comentó el suceso, llamó a la calma.
"Obviamente, todo el mundo debería mantener la calma y seguir con sus vidas con normalidad, con tanta normalidad como puedan", dijo a Sky News.