INTERNACIONAL
Estados Unidos

Joe Biden renueva el decreto que declara a Venezuela "amenaza inusual y extraordinaria"

La medida fue emitida por primera vez durante el gobierno de Barack Obama. De ahí en más, se prorrogó cada tres meses. Nicolás Maduro rechazó nuevamente la norma asegurando que Venezuela "no representa ni representará jamás una amenaza".

Biden Maduro Decreto Venezuela
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, junto a Nicolás Maduro. | AFP

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, prorrogó una vez más la vigencia del decreto que cataloga a Venezuela como “amenaza inusual y extraordinaria” para la seguridad del país. 

Dicha norma fue promulgado el 8 de marzo de 2015, durante la presidencia de Barack Obama  Desde entonces, se renovó cada tres meses. El expresidente Donald Trump mantuvo vigente la medida sobre la nación comandada por Nicolás Maduro. El miércoles 3 de marzo, Biden realizó la primera prórroga a un mes de iniciado su mandato el pasado 20 de enero.

“La situación en Venezuela continúa representando una amenaza inusual y extraordinaria para la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos”, afirmó a través de un breve comunicado emitido por la Casa Blanca. “Por lo tanto, he determinado que es necesario continuar con la emergencia nacional declarada en el decreto 13.692", concluyó.

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El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden.

La administración de Maduro respondió ante las declaraciones del presidente norteamericano, rechazando "la renovación del decreto ilegal bajo el cual el gobierno de Estados Unidos aplica medidas coercitivas unilaterales como parte de su política de agresiones crueles y sistemáticas en contra del pueblo venezolano".

Asimismo, lamentó que el nuevo gobierno "continúe alejándose de la diplomacia y reiterando el modelo de agresión de la administración pasada, poniendo en riesgo áreas tan vitales como alimentación, salud y otros derechos humanos".

Finalizó su contestación asegurando que Venezuela "es libre e irrevocablemente independiente" y "no representa ni representará jamás una amenaza para Estados Unidos ni para ningún país del mundo”.

 

JFG