La autoproclamada presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, trató en la noche de este miércoles 13 de avanzar con sus primeros actos de gobierno. Así luego de sellar un acuerdo con la cúpula de las Fuerzas Armadas en un Palacio Quemado militarizado y vallado, la ex senadora nombró a once ministros para formar su Gabinete.
Mientras decenas de miles de personas reclamaban en las calles respeto por la Constitución y exigían a los nuevos dirigentes en el poder que no permitan más actos racistas contra las comunidades indígenas, Añez armó una agenda típica de primeros días de un gobierno: así en su primer mensaje oficial ante la prensa, avanzó con las primeras juras de funcionarios.
"Este mandato presidencial de carácter estrictamente provisional tendrá dos objetivos fundamentales: la derogación de la sentencia inconstitucional 0084/2017 de 28 de noviembre de 2017 y la convocatoria a elecciones generales en el tiempo más breve posible tal y como lo establece la Constitución", prometió Áñez frente a la prensa, en referencia al fallo que habilitó la candidatura de Morales a una tercera reelección en los comicios del mes pasado, hoy virtualmente anulados
Áñez había asegurado más temprano que tuvo que asumir "dado el vacío de poder generado por la huida de quienes perpetraron el fraude", en alusión al asilo pedido por Evo Morales en México y a las denuncias de fraude que ayer oficializó el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, que son rechazadas por la fuerza del derrocado presidente, el Movimiento al Socialismo (MAS).
Quién es Jeanine Añez, la senadora que se autoproclamó como presidenta interina de Bolivia
Acto seguido, Añez tomó juramente a la nueva cúpula de las Fuerzas Armadas en un acto marcado por los símbolos cristianos y las menciones a la Biblia, Dios, la Constitución y la patria por igual, consignó la agencia Télam.
El plan era tomar posesión en horas de la tarde a sus primeros ministros, pero la situación afuera se tornaba cada vez más tensa y el auditorio cívico-militar presente en el Palacio Quemado tenía que salir por razones de seguridad. Una vez que abrieron las puertas, los efectos del gas lacrimógeno que sobrevolaba la Plaza Murillo de enfrente y los gritos de las protestas se hicieron sentir con fuerza.
La asunción de los once miembros del nuevo gabinete, entonces, se postergó varias horas hasta entrada la noche, cuando finalmente Áñez pudo oficializar a sus ministros, entre los que hay muchas caras nuevas y sobresale la presencia de Karen Longaric, la primera canciller mujer de la historia del país. Uno de los detalles es que entre los once funcionarios hay solo dos mujeres.
La lista de ministros:
- Jerjes Justiniano Atalá, ministro de la Presidencia
- Roxana Lizarraga, ministra de Comunicación
- Fernando López Julio, ministro de Defensa
- José Luis Parada, ministro de Economía
- Arturo Murillo, ministro de Gobierno
- Álvaro Coimbra Cornejo, ministro de Justicia
- Yerko Núñez, ministro de Obras Públicas
- Karen Longaric, ministra de Relaciones Exteriores
- María Elva Pinckert, ministra de Medio Ambiente
- Alvaro Guzmán Collao, Energías,
- Mario Ordoñez, Desarrollo Rural y Tierras
Se presume que este jueves 14 de noviembre serán posesionados los 11 ministros restantes, para completar de esa manera el gabinete.
Áñez prometió llamar a elecciones y derogar el fallo que habilitó a Evo Morales a postularse
Mientras tanto eso ocurría en Bolivia, desde México la novedad fueron las declaraciones del expresidente Evo Morales, quien dijo este miércoles 13 que está dispuesto a regresar a su país, "pacificar si los bolivianos me lo piden, no para ser candidato".
Morales está asilado en el país azteca, luego que denunciara que su vida y la de su familiares estaba en peligro si permanecía en el país vecino. En su primera conferencia de prensa desde el exilio, Morales reiteró que con su dimisión buscó detener la violencia que ha sacudido Bolivia, consignó la agencia AFP.
"Si mi pueblo pide, estamos dispuestos a volver (...) Vamos a volver tarde o temprano (...) mejor lo antes posible para pacificar Bolivia", dijo aunque acaró que no regresaría para ser candidato.
Reiteró su llamado a un diálogo nacional en el que podrían participar "países amigos" en una suerte de mediación entre las fuerzas políticas.
"Es importante el diálogo nacional. Sin diálogo nacional estoy viendo que a va a ser difícil parar esta confrontación", añadió. El dirigente hizo un llamado a la policía y a las Fuerzas Armadas, que lo presionaron para que presentara su renuncia, a no "usar bala contra el pueblo".
Hasta este miércoles, suman 10 los muertos en Bolivia en las protestas que se desataron tras las polémicas elecciones en las que Morales resultó reelecto para un cuarto mandato, comicios que fueron tachados de fraudulentos por la oposición y en los que una misión de auditoría de la OEA encontró "irregularidades".
ED/HB
