El exministro Gustavo Bebianno, despedido de su cargo el lunes por Jair Bolsonaro, dijo estar indignado y aseguró que el presidente brasileño es “manipulado” por su hijo, el influyente Carlos Bolsonaro, en otro capítulo de una crisis política que afecta al gobierno. "El señor Carlos Bolsonaro hizo una macumba psicológica en la cabeza de su padre, no puedo admitir eso", declaró Bebianno que hasta el lunes fue el jefe de la Secretaría General de la Presidencia.
Bebianno también había sido el hombre de confianza de Bolsonaro durante la campaña electoral de 2018 pero la relación con el mandatario se desgastó en los últimos días. El exministro fue retirado de su cargo en medio de un escándalo de corrupción vinculado al desvío de dinero público para la campaña electoral del gobernante Partido Social Liberal (PSL).
"Mi indignación es por haber servido como un soldado leal dispuesto a matar o morir y al final de la línea fui crucificado con un tiro en la espalda", aseguró Bebianno a una radio de Sao Paulo. Paralelamente la revista Veja publicó audios reservados entre Bolsonaro y su excolaborador, que al parecer fue quien liberó esas grabaciones. En una de esas grabaciones Bebianno le dijo al mandatario que estaba "envenenado" por los consejos de su hijo Carlos.
Apodado el "pitbull" por su propio padre, Carlos Bolsonaro, de 36 años, el segundo hijo del presidente, es el que logró el despido del ministro Bebianno, después de 49 días al frente de la Secretaría General de la Presidencia. Se consideraba como uno de los hombres de confianza del mandatario ultraderechista.
La semana pasada Bebianno se vio envuelto en una supuesta trama de creación de candidatos "fantasma" para recibir fondos electorales durante las legislativas de octubre. Para intentar quitarle hierro a la crisis, Bebianno dijo haber hablado varias veces con el presidente desde la revelación del escándalo.
El estilo de Carlos Bolsonaro es agresivo (una vez llamó “cerdos” a los medios de comunicación) y, según el diario O Globo, que estudió 500 de sus tuits, el 72% contenían ataques.
Carlos Bolsonaro, encargado de la estrategia de su padre en las redes sociales durante la campaña electoral de 2018, aprovechó la ocasión, desmintiendo en Twitter cualquier contacto entre el ministro y el presidente, presentando como prueba una grabación en la cual Bolsonaro, hospitalizado en ese momento en Sao Paulo, le decía a su ministro que no podía atenderlo.
El enfrentamiento había empezado meses antes, cuando el "pitbull" recibió de mala manera en las redes sociales el nombramiento de Bebianno en uno de los puestos claves del palacio presidencial. "Como logró su objetivo, se puede decir que Carlos Bolsonaro sumó puntos. Pero, en realidad, el gobierno perdió bastante más, porque los conflictos internos quedaron expuestos", opina Geraldo Monteiro, politólogo en la Universidad del Estado de Rio de Janeiro.
El gobierno de Bolsonaro está compuesto por varios núcleos heterogéneos "que funcionan con lógicas diferentes y defienden sus propios intereses", afirma. Sin embargo, es el "núcleo familiar" el que "goza de la mayor confianza por parte del presidente", aunque no esté presente en el gobierno. El célebre autor Ruy Castro escribió en el diario Folha de S. Paulo que Carlos, que se considera tal vez "un Richelieu", eminencia gris del rey francés Luis XIII, "recuerda más bien a Bruto", el protegido de Julio César que contribuyó a la caída del dirigente romano.
D.S.