Viena - El Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) transmitió hoy un informe a las Naciones Unidas en el que indica que Irán no frenó su programa nuclear, mientras que el presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad, aseguró que su país continuará con el mismo.
"Irán continuó con la construcción de la planta piloto de enriquecimiento de Natanz", denuncia el documento de seis páginas elaborado por el director de OIEA, Mohammed Al Baradei.
Según el escrito que recibió el Consejo de Seguridad de ONU hay más de 300 centrifugas listas para enriquecer uranio, paso previo para la obtención de combustible nuclear.
El programa de energía atómica iraní se transformó en un conflicto de primera importancia debido a que las potencias creen en que Irán busca armarse de un arsenal nuclear, mientras que Teherán aseguró que sus trabajos sólo tienen fines pacíficos. El informe se dió a conocer un días más tarde de que venciera el plazo de 60 días que el Consejo de Seguridad le impuso al gobierno de la república islámica para que cese el enriquecimiento de uranio.
En tanto, el presidente iraní sostuvo que " su nación defenderá sus derechos hasta el final y resistiremos en este camino, ya que el pueblo de Irán camina por el sendero del acceso a los conocimientos nucleares según las leyes, conocimientos que considera como un derecho suyo obvio".
Para Ahmadineyad, el asunto nuclear iraní es una prueba para dar a conocer y a discernir quiénes son los que respetan la ley y quiénes los imperialistas. "Quiénes respetan la ley son aquellos que partidarios de que el pueblo iraní acceda a la tecnología pacífica nuclear según la ley y las normas", afirmó, en declaraciones recogidas por la agencia oficial IRNA.
"Frente a este grupo están los imperialistas, que se oponen al derecho del pueblo iraní a acceder a la tecnología nuclear civil", precisó para agregar que “Irán es una nación amante de la paz, de la fraternidad y del diálogo y no cederá un ápice en sus derechos".
" Lamentablemente, las potencias arrogantes quieren para sí todo lo bueno, las bendiciones, los conocimientos y el poder, y no quieren que la nación iraní explote completamente la energía atómica. Pero deberían saber que este pueblo querido resiste unido y como una piña en este camino", enfatizó el mandatario.
Ahmadinejad no tiene la última palabra en política nuclear, pero la principal autoridad, el líder supremo ayatolá Ali Jamenei, también dijo que Irán seguirá adelante con unas actividades que las autoridades iraníes insisten están destinadas a generar electricidad. A su vez, para el presidente de la Comisión de Seguridad Nacional y Política Exterior del Parlamento iraní, Alaeddin Boruyerdi, el informe de El Baradei "no denuncia nada, sino que únicamente informa de lo que ha hecho Irán".
"En todo caso tendrá sus aspectos positivos y negativos, ya que si bien destacará el aumento de las cámaras de vigilancia en las instalaciones nucleares, con toda seguridad en el informe también figurará la continuidad del enriquecimiento de uranio".
El presidente de la Comisión parlamentaria aseguró que Irán "no pide ni un ápice más de lo que establece el artículo cuarto del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), por el cual todo Estado miembro tiene derecho a disponer de energía nuclear".
En tanto, la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice; el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Frank-Walter Steinmeier; su homólogo ruso, Sergei Lavrov; y el jefe de Política Exterior de la Unión Europea, Javier Solana, se reunirán en las próximas horas en Berlín para abordar los pasos a seguir con Irán.