Ucrania avanzó en el despliegue de su contraofensiva para intentar romper la línea de defensa de Rusia territorios de la frontera suroriental que permanecen bajo ocupación.
Después de meses de preparación, la primavera habilitó a las tropas comandadas por el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, a intensificar sus actividades para favorecer su posición. En especial en Jersón, una de las regiones que sirven de puente terrestre hacia la Península de Crimea, un enclave militar anexado por Rusia.
Sin embargo, del lado del gobierno ucraniano rige un fuerte hermetismo respecto a los datos que podrían dar cuenta de la tan anunciada contraofensiva ucraniana mientras intenta a contrarreloj garantizar el avance en la primera etapa de la guerra. A esto suman acusaciones cruzadas entre Kiev y Moscú por varios incidentes, entre ellos el devastador bombardeo a la represa Kajovka que provocó evacuaciones masivas en los últimos días.
Lo que se sabe de la contraofensiva ucraniana
Desde hace semanas, Kiev multiplicó las acciones sorpresivas para condicionar el campo de batalla: drones en Moscú, ataques en suelo ruso, operaciones de reconocimiento para poner a prueba las defensas del enemigo.
Si bien no hay cifras oficiales, el avance ucraniano quedó en evidencia de la mano del Ministerio de Defensa de Rusia. Citando a su titular Sergei Shoigu, aseguró a través de Telegram que la 47.ª Brigada Mecanizada de Ucrania había realizado cuatro intentos de atravesar las líneas rusas con hasta 1.500 personas y 150 vehículos blindados en la región sureña de Zaporiyia, bajo ocupación rusa.
Según estimaron algunos analistas, esto indicaría que la tan anunciada contraofensiva ucraniana habría dado sus primeros pasos. "A la vista del uso de materiales occidentales, parece que la ofensiva ucraniana está en curso", opinó el analista estadounidense Michael Kofman, citado por Financial Times.
A esta visión aportó el destacado Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos. No solo indicó que "la contraofensiva ucraniana comenzó", sino también que se espera "no solo una gran operación" sino una serie de acciones coordinadas de Kiev para quebrar la línea de defensa rusa.
En tanto, Moscú asegura haber haber repelido un ataque en esa región y haber infligido "pérdidas significativas" a las tropas ucranianas en términos de soldados como de armas, agregó Shoigu.
El combate en esa región es trascendental para ambos bandos. Del lado ruso, el frente en Zaporiyia está "fortificado" pero con menor densidad que en otras regiones como Donetsk, a pesar de que se trata de un objetivo estratégico para Ucrania porque le permite a Rusia mantener el frente unificado. "Si llegan a Melitópol es un objetivo estratégico porque se corta el frente en dos. Todos los indicios convergen en esa zona", indicó a AFP el historiador militar francés Michel Goya.
Ucrania acusó a Rusia de bombardear a los evacuados de la zona inundada de la represa de Kajovka
Rusia y su "línea Fabergé"
A lo largo del frente, los rusos desplegaron "unas seis líneas defensivas", explicó una fuente militar francesa. En la zona de Zaporiyia, en el sur, algunos rusos bautizaron esta estrategia como la "línea Fabergé", en referencia a la estructura de las célebres piezas de joyería fabricadas para los zares en el siglo XIX.
"La primera línea, está compuesta de puntos de apoyo que permiten ver lo que pasa, la segunda está orientada a frenar un ataque y está muy minada. Después está la artillería, los primeros tanques para el contraataque y al final las reservas, y después los puestos de comando y la logística", detalló el oficial. Toda esta estructura ocupa unos 30 kilómetros.
Para los ucranianos, "las operaciones iniciales de la contraofensiva podrían ser las más difíciles y las más lentas", según el ISW. "Se prevén reveses iniciales" antes de que logren romper las líneas de defensa, que los rusos han establecido y consolidado desde hace meses.
Las dudas sobre la contraofensiva
Sin embargo, siguiendo la línea adoptada en los últimos días, las autoridades ucranianas se muestran muy vagas respecto al tenor de sus acciones. Los funcionarios ucranianos dieron pocos detalles sobre cómo van las cosas. Tras visitar a los evacuados en las zonas inundadas de Zaporiyia, el presidente Volodímir Zelenski describió "batallas muy duras".
"¡Hay un resultado, y estoy agradecido con todos los que aseguran el resultado!", dijo en su discurso del jueves por la noche. Sin embargo, es posible que se refiriera a la lucha alrededor de Bajmut, que se encuentra en una parte muy diferente de la línea del frente, y donde las fuerzas ucranianas han logrado avances limitados recientemente.
"Me cuesta pensar que uno de los beligerantes pueda imponer una ventaja sobre el otro", señaló la semana pasada una fuente de un servicio de inteligencia occidental en diálogo con AFP, previendo una especie de empate técnico.
Más allá de las declaraciones de ambos bandos y las acusaciones cruzadas, todavía no hay información certera sobre lo que realmente está pasando en el frente de batalla y hasta qué punto Ucrania avanzó en su contraofensiva. Esto se verá aún más dificultado por la propaganda desplegada de ambos lados del frente de batalla.
Lo que está en juego para Ucrania
A poco más de dos años de la invasión, Ucrania se juega mucho en su contraofensiva que viene diagramando hace meses y que estuvo pensada para la primavera. Las autoridades saben que no tendrán muchas ocasiones para forzar a los rusos a retroceder, recuperar los territorios ocupados en el sur y el este del país o al menos tener mejores condiciones para sentarse a negociar.
"La presión sobre los ucranianos es muy fuerte, y tal vez estemos en un momento bisagra en la guerra", comentó a AFP un alto mando del ejército francés, refiriéndose a las acciones preparatorias que según él forman parte de la contraofensiva.
"Tengo la sensación de que irán por todo. Si funciona, negociarán en posición de fuerza, y si no funciona (...) en menos de dos años hay elecciones en Estados Unidos, algunos depósitos (de armas occidentales) han alcanzado niveles críticos, y saben que la situación está tensa", apuntó el oficial. Por último, indicó que "si no funciona, la negociación se hará en condiciones menos ventajosas" para los ucranianos, que "saben esto muy bien" y por eso mismo están "apostando fuerte".
CDI CP