Evo Morales proclamó al exministro Luis Arce como su candidato presidencial
El exfuncionario de la cartera de Hacienda es considerado el padre del llamado por algunos "milagro económico" boliviano. Su compañero de fórmula será el excanciller Choquehuanca.
Luis Arce Catacora, candidato del MAS a la presidencia de Bolivia. |
DPA
El expresidente de Bolivia Evo Morales anunció que los exfuncionarios de su gobierno Luis Arce Catacora y David Choquehuanca serán candidatos del Movimiento al Socialismo (MAS) a la Presidencia y la Vicepresidencia de su país. Se trata de los ministros que más tiempo estuvieron en los 14 años de gobierno de Morales.
La fórmula candidata fue elegida directamente por Morales, autoproclamado jefe de campaña del MAS, desde Buenos Aires: "El candidato a presidente es el compañero Luis Arce Catacora y a vicepresidente es el hermano David Choquehuanca", dijo Morales, quien lamentó haber "sacrificado" a Andrónico Rodríguez, joven dirigente cocalero, en favor del proyecto político y pese a que era el primero en las encuestas.
Morales afirmó que Arce garantiza el crecimiento de la economía nacional. Nacido en La Paz el 28 de septiembre de 1963, se graduó como licenciado en economía en la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) y obtuvo un Master en Ciencias Económicas (MSc in Economics) de la Universidad de Warwick.
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Luis Arce, de 56 años, es considerado el padre del llamado por algunos "milagro económico" boliviano. Su compañero de fórmula será el excanciller Choquehuanca.
Fue nombrado ministro de Hacienda en 2006, durante el primer gobierno de Morales. En 2009 fue nombrado ministro de Economía y Finanzas Públicas. En junio de 2017 tuvo que dejar el cargo provisionalmente y lo recuperó 18 meses después. Su última gestión a la cabeza de este ministerio fue de enero a diciembre del año 2019.
Arce es considerado el padre del llamado por algunos "milagro económico" boliviano, basado en un modelo de desarrollo social comunitario productivo. A partir de la nacionalización de los hidrocarburos de 2006, que coincidió con un boom sin precedentes de los precios del petróleo, Bolivia comenzó a crecer a un ritmo anual del 4,9%, y la pobreza extrema se redujo de 38,2% en 2005 a 17,1% en 2018, según cifras oficiales.
Arce es "una combinación entre la ciudad y el campo para continuar el proceso de cambio. Nuestro movimiento campesino no es excluyente y no margina", dijo Morales, quien gobernó Bolivia durante casi 14 años hasta su renuncia el 10 de noviembre. "Luis Arce garantiza la economía nacional", aseguró Morales, ahora refugiado en Argentina.
Choquehuanca, según Evo Morales, garantiza la unidad del movimiento indígena originario campesino, manteniendo la política de incluso campo-ciudad. Nacido también en La Paz, es un político aimara que fue importante durante los años de gobierno de Morales, ya que durante once años (2006-2017) fue ministro de Asuntos Exteriores.
Antes del gobierno del MAS Choquehuanca fue un conocido dirigente sindical y destacó por su apoyo a las organizaciones del movimiento campesino, especialmente a la Confederación Sindical Única de Campesinos de Bolivia (CSUTCB). En 2017 asumió la secretaría general de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).
Tanto Arce como Choquehuanca viajaron a Buenos Aires para las deliberaciones en las que participaron unos 50 dirigentes del partido, de sindicatos y de movimientos sociales.
Durante su gestión como canciller, Bolivia entabló un juicio ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya por una salida soberana al océano Pacífico. Pero el tribunal falló en contra del reclamo boliviano en 2018, cuando Choquehuanca ya había dejado el cargo.
Los candidatos serán proclamados formalmente en un acto en Buenos Aires el próximo miércoles y las elecciones se celebrarán el próximo 3 de mayo (con eventual segunda vuelta está fijada para el 14 de junio). Las últimas encuestas al anuncio le asignaban al MAS una intención de voto del 20,7%, por encima de los demás candidatos. El segundo favorito es el expresidente centrista Carlos Mesa, con 13,8%, quien
Morales renunció a la presidencia en medio de la convulsión social tras su victoria en la primera vuelta de las presidenciales del 20 de octubre, comicios que fueron suspendidos después de que una auditoría de la OEA hallara irregularidades. La presidencia interina fue asumida por la senadora Jeanine Áñez, cuyo cargo fue extendido recientemente por el Tribunal Constitucional de Bolivia hasta que asuman nuevas autoridades tras las elecciones.
