Una fuerte movimiento sísmico de una magnitud de 4,7 en la escala Richter en el centro-este de Italia hizo temblar la costa adriática este martes, alrededor de las 23 hora local.
El fuerte temblor se produjo a las 23H48 (21H48 GMT) cerca de Montelcifone, en la región de Molise, a 19 km de profundidad, según estimó el Instituto Nacional de Geofísica y de Vulcanología (INGV).
Afortunadamente, hasta el momento no se registraron víctmas, aunque la Protección Civil italiana afirmó que se encuentran "llevando a cabo verificaciones sobre posibles daños o víctimas", de acuerdo a información publicada en su cuenta de Twitter.
"De momento, el centro de comando de los bomberos solo recibió peticiones de información de parte de la población, ninguna solicitud de socorro. Hay operaciones de reconocimiento en marcha sobre el terreno", afirmaron por su parte los bomberos.
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De acuerdo a información de medios italianos, varios responsables locales aseguraron que hasta el momento no se había registrado ningún daño significativo.
Gran parte del territorio de Italia, situada entre la placa euroasiática y la africana, está sujeto a un alto riesgo sísmico: cada año se registran miles de temblores, aunque la población no siente la mayoría de ellos dado que no suelen ser de gran magnitud.
En ese país, los daños suelen registrarse en los sismos de magnitud superior a 5,5, según el INGV. No obstante, un antecedente de agosto de 2017 fue la excepción cuando un sismo de magnitud 4,0 provocó el hundimiento de varios edificios en la isla de Isquia, frente a Nápoles, y dejó dos muertos.
