“Caffé e cornetto” en el bar y visitar amigos, dos clásicos de la vida italiana, alegraron esta semana la gradual reapertura dentro de cada Región, y aunque los contactos físicos están limitados a la distancia de seguridad, el tango sigue prodigando abrazos musicales e internacionales. La pandemia está siendo controlada en Italia y los primeros cinco días de la segunda etapa de reapertura no han decepcionado pues el índice de contagio registrado este viernes se encuentra bajo el valor 1 en todas las Regiones del país menos en una, Val d’Aosta (norte), en donde es de 1,06.
El dato, informado oficialmente por el Instituto Superior de Sanidad (ISS), se suma a un descenso diario de casos de coronavirus, también verificado en la Lombardía, la Región más golpeada por la enfermedad. Sin embargo, el presidente del ISS, Silvio Brusaferro, destacó que el covid-19 “todavía circula” y que, en consecuencia, “no se puede excluir un aumento de contagios en las próximas semanas”.
La advertencia, que se agrega a las ya reiteradas por el premier Giuseppe Conte de “volver a cerrar” la circulación si, como ha ocurrido en algunos lugares, no se respetan las medidas de seguridad, es decir, uso de los dispositivos de protección individual, sobre todo de los barbijos, y reuniones entre pocas personas.
Saludarse acercando los codos es un ritual divertido y ya frecuente; las grandes mesas típicas de parientes y amigos se reemplazan con almuerzos y cenas entre al máximo cuatro personas sentadas dos en las cabeceras y dos hacia el centro pero no frente a frente sino en diagonal; los obreros de la construcción retomen las tareas interrumpidas el 9 de marzo y en los viveros la compra de plantas continúa las prácticas de jardinería incrementadas exponencialmente durante el confinamiento.
En tanto, unos más y otros menos, todos se van habituando a sobrellevar las limitaciones y muchos esperan a partir del 3 de junio la posibilidad de superar las fronteras regionales italianas e internacionales europeas.
Unos más y otros menos, todos se van habituando a sobrellevar las limitaciones
El Festival de Cine de Venecia anunció que se realizará en setiembre y desde el 2 de junio al 30 de agosto reabrirá en Roma la muestra “Raffaello 1520- 1483” en las Escuderías del Quirinal, cerrada a causa de la emergencia sanitaria, un vento que intenta restituir el valos universal del arte del maestro. La fecha de la reapertura simbólicamente coincide con la celebraciónde la Fiesta de la República. La cultura ofrece así esta un renacimiento que llega acompañado del verano y el sol y cuando no pocas familias carecerán de los medios económicos necesarios para desplazarse en grandes vacaciones.
Y el tango aporta un abrazo musical internacional de la mano de los jóvenes italianos, uno, pianista, nacido en Sicilia y radicado en Florencia, y otro de Roma pero trotamundos desde pequeño y ahora establecido en Montevideo. Se trata de Fabrizio Mocata, pianista y compositor, y de Ivan Pantarelli, bajista, compositor y productor cinematográfico, provienen de una exigente formación clásica y por diferentes caminos se encontraron en el tango que ahora los halaga con la nominación a los Premios Gardel de Argentina. “Son el reconocimiento más prestigioso de la industria discográfica argentina, los ‘Grammy del tango’”, se entusiasma Ivan y destaca que “No es raro ver nombres de origen italiano entre los nominados a los Gardel, sobre todo en la categoría ‘tango’, dado el profundo vínculo entre la Península y el país sudamericano”.
La novedad es que Mocata figura este año con tres candidaturas en dos categorías y “nunca había sucedido que un artista nacido en Italia recibiera tanta atención en una categoría tan competitiva en Argentina”, subraya Ivan.
En efecto, “Cruzando Aguas” y “Swango”, dos álbumes publicados recientemente por Acqua Records de Buenos Aires, son candidatos como “Mejor álbum orquesta de Tango”.
Sandra Luna, Fabián Bertero, Julio Cobelli y el estadounidense Paul Wertico acompañan las composiciones de Mocata en las que confluyen “influencias musicales diversas en un tango de actualidad, ciudadano, que cruza las aguas del Mediterráneo y las del Río da la Plata”, dice Pantarelli. Si esto no bastara, Fabrizio figura nominado además como pianista en la categoría “Album Conceptual” acompañando al cantante M. Boccanegra en el disco “Que me Contursi”.
Fotos | Italia levanta la cuarentena, la gente sale a la calle y hay visitas al Vaticano
Pero el abrazo cultural incluye otro reconocimiento para estos creadores, pues en los Gardel 2020 el productor discográfico “Cruzando Aguas” y “Swango” , Ivan Pantarelli, está también nominado a los Gardel.
Se trata del primer productor discográfico italiano candiato a los Premios, una gran satisfacción para Ivan y su empresa “Gruvita Media” “no sólo en lo personal. Tal vez, ignorada por ella misma, Italia todavía es capaz de exportar cultura”, reflexiona este joven profesional.
Mocata considera que las candidaturas “a nivel personal son una señal de estar en el camino adecuado. Una dirección que es reconocida en Buenos Aires como auténtica y no como la producción musical de un extranjero”.
Los abrazos culturales, la integración en este caso a través de la música, aportan un significativo mensaje en estos tiempos de aislamiento y de no pocas discriminaciones.
