El príncipe Harry testificará este martes en un juicio contra un editor de The Mirror, acusado de recopilar información sobre él de manera presuntamente ilegal. Será la primera declaración antes de enfrentar a otros medios británicos, The Sun y Daily Mail. De esta manera, se convertirá en el primer miembro de la familia real que declara ante la Justicia en más de un siglo.
Se esperaba que el hijo del rey Carlos III, de 38 años, se presentara este lunes en el juicio contra Mirror Group Newspapers (MGN), editorial del The Mirror y la revista Sunday People. Sin embargo, su abogado, David Sherborne, informó que estuvo celebrando el cumpleaños de su hija menor, la princesa Lilibet, en California, y no voló al Reino Unido hasta el domingo por la noche, por lo que estará en el estrado un día después de lo planeado.
Esta situación causó la sorpresa del juez Timothy Fancourt y del abogado de MGN, Andrew Green, que dejó trascender que estaba "profundamente molesto", ya que su intención era interrogar a Harry durante un día y medio. "Lamento el tiempo que hemos perdido", dijo el abogado.
El duque de Sussex no había vuelto a su país desde la ceremonia de coronación de su padre el pasado 6 de mayo, a la que asistió sin su esposa, la actriz estadounidense Meghan Markle. Después de la ceremonia regresó inmediatamente a Estados Unidos, donde la pareja reside desde 2020.
Cuando el príncipe testifique, será la primera declaración de un miembro de la realeza británica desde Eduardo VII, que lo hizo en un juicio por difamación en 1891, antes de convertirse en monarca.
Hace tres años, Harry sacudió a la monarquía británica cuando junto a Meghan anunció que abandonaban la institución. La pareja alegó la "insoportable presión de los medios", y los ataques racistas contra la actriz norteamericana, entre otros motivos, para dejar el Reino Unido. A raíz de ello, la pareja tiene otras demandas abiertas contra la prensa de su país.
Los periodistas mencionados en el caso de Harry también fueron señalados en una causa similar en 2015. El principal acusado es Piers Morgan, ex editor de The Mirror. Además del miembro de la familia real, dos actores de televisión y a la ex esposa de un famoso humorista acusaron al grupo editorial de conseguir información sobre ellos a través de métodos ilegales, incluyendo el pirateo de sus teléfonos, entre 1996 y 2011.
Escuchas a Lady Di y sus hijos
Harry demandó al editor de The Mirror, alegando haber sido víctima de una recopilación ilegal de información junto con su hermano, el príncipe Guillermo, su madre, Diana, y su padre, Carlos III. El duque culpa a las publicaciones de los tabloides de sus "enormes episodios de depresión y paranoia" que lo llevaron a separarse de la empresaria Chelsy Davy, su novia entre 2004 y 2010.
En el inicio del juicio el 10 de mayo, MGN reconoció "algunos indicios" de recopilación ilícita de información, pidió disculpas y aseguró que "esa conducta no volverá a repetirse".
Pero el abogado Green negó que se hubiesen interceptado mensajes de los buzones de voz y argumentó que algunas demandas se presentaron demasiado tarde, décadas después de los presuntos hechos, por lo que estarían "prescriptas".
Por su parte, el abogado de Harry aseguró que el hijo de Diana y Carlos III tenía 11 años cuando se inició la primera actividad ilegal contra él. Sus padres se habían divorciado recientemente y su madre lo había visitado en el colegio, en 1995. En este contexto, los periodistas habrían escuchado las conversaciones privadas de la princesa, e incluso supieron acerca de sus intercambios con su amigo, el actor Michael Barrymore.
En sus argumentos iniciales, el abogado acusó a la empresa de medios de haber contratado a "al menos 30 detectives privados diferentes" para recopilar información ilegalmente.
"Tenían un gran interés en cada aspecto de su vida íntima", porque los artículos sobre el joven príncipe "impulsaban las ventas", subrayó.
De los 147 artículos de prensa denunciados por Harry, quinto en la línea de sucesión al trono, el juez Fancourt en estos momentos analiza 33.
FP
LT