Mientras París es el escenario de violentos enfrentamientos en una nueva jornada de protesta de los "chalecos amarillos", el presidente de Francia, Emmanuel Macron, brindó este sábado una conferencia de prensa en el marco de la cumbre del G20 que se desarrolla en la Ciudad de Buenos Aires. "Lo ocurrido hoy no tiene que ver con la expresión pacífica de una rabia legítima. Ninguna causa justifica que se ataquen las fuerzas del orden, que se roben los comercios, que se incendien edificios públicos y privados, se amenace a periodistas o transeúntes, o se ensucie el Arco del Triunfo. Los culpables de esta violencia no quieren mejoras, quieren el caos. Y así traicionan las causas que pretenden servir", expresó el mandatario.
Además, detalló que se buscará "identificar" a quienes son parte de las revueltas. "Mañana por la mañana, ya en París, convoqué una reunión con el primer Ministro, el ministro del Interior y el conjunto de los servicios competentes. Siempre respetaré las manifestaciones, contestaciones y oposiciones. Pero nunca aceptaré la violencia", remarcó. En cuanto a la cumbre, el líder francés aseguró que "Macri ha logrado que este G20 sea un auténtico éxito", y en relación a los acuerdos climáticos, afirmó: "En el clima al igual que en el comercio, considero que el G20 alcanzó los acuerdos que eran necesarios".
Este sábado, más de 255 personas fueron detenidas en medio de una manifestación fuera de control que incluyó nubes de gases lacrimógenos, contenedores de basura incendiados, saqueos y corridas. En principio los enfrentamientos se concentraron en torno al Arco de Triunfo, en la parte alta de los Campos Elíseos, pero con el correr de las horas, las protestas comenzaron a extenderse por distintos puntos de la ciudad y el país.
Mientras tanto, Macron se encuentra en la Argentina como parte de la cumbre del G20 que se lleva a cabo en la Ciudad de Buenos Aires. Durante sus días en el foro, se mostró distendido y mantuvo encuentros con el premier de Canadá, Justin Trudeau; con el presidente chino, Xi Jinping; y con el sudafricano, Cyril Ramaphosa. Además, visitó junto a su esposa el Parque de la Memoria y la sede de la ex Esma, donde charló con integrantes de la organización de Abuelas de Plaza de Mayo y con nietos restituidos.
El movimiento de los "chalecos amarillos", que alude a la prenda que deben tener todos los automovilistas en sus vehículos en Francia, pide entre otras cosas, una mejora del poder adquisitivo, menos impuestos y una baja en el precio de los combustibles. Esta es el tercer fin de semana consecutivo de protestas, tras las del 17 y del 24 de noviembre pasado, que se desarrollaron con graves disturbios también en los Campos Elíseos.
