El Gobierno británico permitió este miércoles 23 de marzo que el magnate ruso, Roman Abramovich, sume 33 millones de euros al Chelsea, con el objetivo de cubrir los gastos del día a día, y así evitar que el club caiga en la ruina.
Esto forma parte de las medidas introducidas para aliviar la situación del equipo inglés, quien atraviesa una crisis económica por las sanciones impuestas al empresario cercano al presidente de la Federación de Rusia, Vladimir Putin, por parte de Downing Street y la Unión Europea.
De esta forma, el club contará con una inyección económica para poder hacer frente a los elevados costos que tiene que afrontar, en especial, por la elevada suma de salarios mensuales que tienen que pagar: se calcula que la cifra ronda las 28 millones de libras, es decir, 30 millones de euros.
Además, el Chelsea fue habilitado para vender entradas en los partidos de Champions League, FA Cup y encuentros femeninos, tanto de local como de visitante. De todas formas, el dinero que recauden por estas ventas no ingresará de forma directa al club, sino que estará destinado a la UEFA y a la Federación Inglesa de Fútbol, al menos hasta que se resuelva la venta del conjunto británico.
Esto significa que, para la ida de los cuartos de final de la Champions League contra el Real Madrid podrán habilitar la venta de entradas, algo que no estaba sucediendo en los últimos encuentros, jugados a puertas cerradas. A su vez, el Chelsea también podrá vender entradas para los partidos de Premier que dispute como visitante, pero no para los de Stamford Bridge.
¿Quienes son los interesados en comprar el Chelsea a Abramóvich?
Para llegar a este punto de acuerdo, el Gobierno británico actualizó la licencia especial que recibió el Chelsea para seguir gestionando los gastos diarios, ahora con venta de entradas incluida en ciertas competencias, pero siempre y cuando los ingresos no vayan al club.