Este sábado vencía el plazo impuesto por el gobierno talibán para que las mujeres afganas vuelvan al retrógrado uso de la burka, cubriéndose completamente "para evitar provocaciones", pero un grupo desafió esa orden y, al menos por un día, protestó con sus rostros descubiertos. Fueron las conductoras y periodistas de los canales TOLOnews, Shamshad TV y 1TV.
La decisión fue una medida de protesta frente a las durísimas condiciones de vestimenta que reimplantaron los talibanes, luego de su regreso al poder a fines del año pasado, luego que Estados Unidos y otras fuerzas occidentales abandonaran ese país. Así a principios de mayo el jefe supremo de los talibanes había emitido una orden según la cual las mujeres debían volver a cubrirse completamente en público, incluido el rostro, idealmente con el burka tradicional, cuando hasta el momento con un paño que cubriera el cabello era suficiente.
El estricto ministerio afgano de Promoción de la Virtud y Prevención del Vicio había ordenado a las presentadoras de televisión que adoptaran las nuevas medidas antes del sábado, pero estas mujeres decidieron no ceder. "Nuestras hermanas temen que si se cubren la cara, lo siguiente que se les dirá será que dejen de trabajar", asegurpo Abid Ehsas, jefe de noticias de Shamshad TV a AFP.
Mohamad Sadeq Akif Mohajir, portavoz del ministerio de Promoción de la Virtud y Prevención del Vicio, acusó a estas periodistas de violar la directiva de los talibanes. "Si no lo hacen, hablaremos con los responsables", advirtió y sostuvo: "Toda persona que vive bajo un sistema y un gobierno en particular debe obedecer las leyes y órdenes de ese sistema, por lo que deben aplicar el orden".
La represalia de los talibanes, en principio, sería despedir a quienes no cumplan con el código de vestimenta y suspender a los hombres cuyas hijas o esposas no obedezcan.
Avance de los talibanes, retroceso para las mujeres
El sábado 7 de mayo los talibanes ordenaron que las mujeres vuelvan a usar en público "un velo que las cubra de pies a cabeza, preferiblemente un burka", que solo deja una pequeña rejilla a la altura de los ojos. Esto significa un total retroceso de los avances que las mujeres habían conseguido en las últimas dos décadas.
"Tendrán que llevar un chador [un término que también se usa para designar al burka] porque es tradicional y respetuoso", señalaba la orden emitida por Hibatullah Akhundzada, el jefe supremo de Afganistán.
"Las mujeres que no sean ni demasiado jóvenes ni demasiado mayores tendrán que cubrir su rostro cuando estén frente a un hombre que no sea miembro de su familia, para evitar la provocación", detallaba el texto y recomendaba "si no tienen algo importante que hacer en el exterior, es mejor para ellas que permanezcan en casa".
Desde el retorno al poder del grupo islamista, a mediados de agosto, el temido ministerio de la Promoción de la Virtud y Prevención del Vicio había publicado varias consignas sobre cómo deben vestirse las mujeres. Pero se trata del primer decreto nacional sobre el tema.