La comunidad hispana crece cada vez con más fuerza en los Estados Unidos. Por lo menos así lo indica un informe de la Fundación Atlas, que asegura que si los hispanos que viven en la tierra comandada por George Bush formaran un país, se trataría de la tercera nación de América Latina por el volumen de su población.
Con 45,5 millones de hispanos, un 15 por ciento de la población total de los Estados Unidos según datos arrojados por el U.S. Census Bureau, ese hipotético país se ubicaría detrás de Brasil, que cuenta con 191,9 millones de habitantes y México, con 109,9. Lo seguirán de cerca naciones como Colombia, con 45 millones y Argentina, con 40,6.
Este crecimiento sostenido llevó a que la comunidad hispana se convierta en la primera minoría en Estados Unidos, desbancando a colectividades más antiguas como la de los afro-americanos, que ahora son 40.7 millones, a los asiáticos, con 15.2 millones, y los indígenas nativos, alrededor de 4.5 millones de personas.
Concentrada en estados como California, Texas, Arizona y la Florida. Según el origen, la mayoría de la “nueva mayoría” son inmigrantes llegados desde México, Puerto Rico y Cuba. Según las proyecciones oficiales estiman que para el año 2050 los latinos en Estados Unidos representarán un 24,4% de la población del país. Las proyecciones oficiales estiman que para el año 2050 los latinos en Estados Unidos representarán un 24,4% de la población del país.
Influencia política. La gran cantidad de hispanos en tierras estadounidenses derivó en una gran relevancia política, conviertiendose en un mercado clave – 3 de cada 20 habitantes- a la hora de definir elecciones. Temas de interés de la comunidad como la política migratoria o la cuestión Cuba, indica el informe de la Fundación Atlas, pueden ser claves en la definición de la competencia electoral.