Un fuerte tornado acompañado de tormentas de granizo en Grecia causó la muerte de al menos seis turistas extranjeros y decenas de personas resultaron heridas. El temporal tuvo lugar en la región de Calcídica, ubicada al norte del país, donde se declaró el estado de emergencia.
La tormenta se produjo en el norte del país, mientras que en el resto de Grecia se han registrados temperaturas de hasta 37 ºC en los dos últimos días. Esta zona turística quedó devastada tras el tornado. Se podían ver numerosos autos volcados, árboles derribados, corrientes de lodo o incluso edificaciones partidas por la mitad.
"Seis turistas murieron y al menos una treintena de personas resultaron heridas en este tornado", indicó Charalambos Steriadis, responsable de Protección Civil en el norte de Grecia a la agencia AFP. "Fue un hecho inédito", precisó.
Todo el sector quedó sin electricidad, debido a las tormentas, y los militares trabajaban para restablecer la corriente.
El tornado duró unos 20 minutos, según detallaron varios testigos a la televisión pública griega ERT. Todo el sector quedó sin electricidad, debido a las tormentas, y los militares trabajaban para restablecer la corriente.
La caída de un árbol mató a un ruso y a su hijo de dos años en un hotel de la estación balnearia de Kassandra, a unos 70 km de Salónica, la segunda ciudad de Grecia. En la cercana localidad de Propontida, una pareja de ancianos checos falleció cuando su caravana instalada en una playa fue arrastrada por las violentas ráfagas de viento. Su hijo y su nieto resultaron heridos.
En un pequeño restaurante tradicional, el tejado fue arrancado por los fuertes vientos e impactó contra una rumana y su hijo que murieron en el acto. Según la policía portuaria, un pescador de unos sesenta años fue declarado desaparecido. Por otro lado, decenas de heridos fueron trasladados a hospitales, según el servicio de Protección Civil.
"Quiero expresar mi dolor en nombre de todos, lloramos la pérdida de estas almas", declaró el ministro de Protección del Ciudadano, Michalis Chrisochoidis, que supervisa las operaciones. El funcionario viajó desde Atenas por la noche hacia el lugar. Se espera igualmente la llegada de otros responsables del nuevo gobierno.
El primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, elegido en las elecciones legislativas del domingo, anuló su agenda del jueves para gestionar esta catástrofe, indicó su oficina.
B.D.N./FeL