En el marco de la sexta edición del festival Lollapalooza Argentina, que tendrá lugar los días 29,30 y 31 de marzo en el Hipódromo de San Isidro, diferentes bandas visitan la redacción de PERFIL para dar un adelanto de lo que se podrá escuchar durante las tres jornadas a pura música. En esta ocasión el cantante de trap Seven Kayne, quien estrenó recientemente su nuevo tema Buenos Aires (el cual cuenta con la colaboración de Khea y Bhavi) cuenta cómo se prepara para esta fecha.
Formado en la música desde muy corta edad, hoy con 19 años es parte del selecto grupo de artistas que lideran los charts y convocan a miles de personas en sus shows por todo el país. "Trato de estar atento a mi arte", sostiene en diálogo con este medio.
Tema "Buenos Aires", de Seven Kayne junto a Khea y Bhavi
—¿Cómo definís el trap?
—El trap proviene del rap mezclado con la nueva generación de sonidos y de todo lo nuevo que se presentó. Al mutar el rap, empezó a ser un poco más melódico y a tener un poco más de sentido musical y menos contenido de queja y de protesta, que es cómo hace el rap. Hoy en Argentina estamos viendo distintas ramas de trap y, dentro de las mismas, vemos canciones que no son de trap, sino que es pop dentro del trap lo que se hace muchas veces en español. Considero que lo mío es trap-soul, la diferencia que tiene con lo que sería un pop-trap sería un poco más la crudeza de mis letras y de cómo digo yo las cosas como me parecen y cómo me mantengo con la esencia del rap en el tema de las rimas y las estructuras al momento de escribir porque no estoy yendo tanto a lo rapero en lo melódico, sino que juego un poco más con la melodía en sí.
—¿Cómo surge?
—El trap viene de una cultura yankee, viene de los negros en los guetos. Acá en Argentina comenzó hace dos años y los que lo llevamos hoy somos los que lo impulsamos en un primer momento. En la actualidad el trap está creciendo a diario en toda habla hispana... ¡por suerte!
—¿Qué bandas o artistas te influencian?
—No tomo influencias de trap de afuera, sino que me siento más influenciado por otra música. Mis representantes son The Weeknd y Bruno Mars.
—¿Cómo escribís las letras de tus temas?
—Escribo lo que me sale, no soy una máquina de escribir ni mucho menos. Tengo muy pocas letras la verdad y la mayoría las tengo afuera, pero lo que escribo es lo que me pasa; lo que siento; lo que quiero para un futuro y es una forma de expresarme y creo que lo hago de una forma en que la gente se relaciona y por eso más que nada saco mi música. Creo que si fuera por mí ni la sacaría, me la guardaría sólo para mi (risas).
—¿Imaginabas el éxito que lograste?
—Empecé desde muy chico, toqué la guitarra desde que tengo conciencia porque en mi familia me la han inculcado, pero era una lejana película la vida del artista, nunca fue algo a lo que apunté, hasta cierto punto obviamente. Porque un día dije 'ok,voy a tirar este proyecto', pero hasta ese momento no es que fue siempre mi sueño. Pero la música siempre fue algo que me hizo muy bien y algo que necesité. Nunca estudié canto, fue algo mucho más orgánico, mucho más de querer expresarme, de crear arte con lo que tengo cargado adentro. Me crié escuchando rock alternativo yankee y compartía mucho eso con mi hermano porque tocaba la guitarra para él mientras cantaba, y cuando él se fue de viaje por un tiempo, yo me crucé con lo que era el freestyle y ahí empecé a conocer el rap y es lo que más tomé y estará conmigo de por vida.
—¿Qué edades promedio tienen tus seguidores?
—Varía mucho, yo me sorprendo de ver todo los días como una persona de 10 años me ve y se le ponen los ojos grandes en la calle, o mismo me subo a un Uber y el conductor de unos 30 y pico me dice '¿vos cantás, no?'. Creo que me sigue un público que ronda entre los 12 y los 22 años, pero es variable.
—¿Te gusta participar de los videoclips de tus canciones?
—Me divierte hacerlos cuando están bien trabajados. He experimentado a esta altura un par de videoclips que no me ha interesado estar por ejemplo y he tenido que estar, y ha sido una buena experiencia. Pero hay un par de videoclips que, si no se trabaja con esfuerzo y con dedicación y para crear una imagen de calidad... A mi lo que me interesa es eso, estar metido en el proyecto, por ser mi música yo la veo como parte de tal, como otra rama de mi arte. Siempre estoy metiéndole a fondo para que quede lo más cercano a mi visión.
—Subís un video y enseguida cosechás miles y miles de reproducciones...
—Me gusta ser consciente de lo rápido que se mueve la información ahora, de que en el momento que yo pongo 'subir' eso le va a llegar a muchísimas personas, entonces trato de estar atento en mi arte y que esté todo listo a la hora de subir el material. Me gusta ir viendo cómo la gente reacciona en vivo y cómo lo recibe. Es tremendo, no dudo que en el futuro sea más rápido, pero ahora mismo lo es. Me llegan mensajes de lugares que ni sabía que existían.
—¿Sos de responder los comentarios que te dejan?
—En general trato de hacerlo pero con los más originales y que tiran buena onda. Aunque intento leerlos todos aunque no llego a responder.
—¿Cómo te tomás la crítica?
—Depende porque está aquella que tiene sentido y la que no. A la que no tiene sentido, la llamo 'hater' y la dejo a un lado, no la tomo, no me siento lastimado ni afectado por eso. Pero después está la crítica constructiva de la gente que opina porque te dice sinceramente por qué no le gusta algo, y eso está buenísimo.
—¿Qué es lo mejor que te da el trap?
—Más que nada los amigos que conocí por esto.
—¿Cómo te preparas para el show del 29 de marzo en el Lollapalooza?
—Ensayando mucho con la banda y con las bailarinas. Voy a tocar con Bhavi.
F.D.S./F.F.
