El periodista Daniel Santoro quedó en el ojo de la tormenta en una causa por espionaje ilegal, por sus vínculos con el abogado Marcelo D´Alessio, quien está acusado de extorsión por parte del empresario agropecuario Pedro Etchebest. En medio de críticas y cuestionamientos desde distintos sectores, el editor del diario Clarín fue homenajeado en la Universidad de Belgrano.
Fue el mismo Santoro quien lo explicó a través de su cuenta de Twitter. “El rector de la Universidad de Belgrano, Avelino Porto, me entregó hoy en forma sorpresiva un diploma como reconocimiento a mi ‘valiosa tarea académica y a los valores personales con que honra a esta institución’. Gracias doctor por su apoyo”, expresó.
Santoro es titular de la cátedra “Metodología y Técnica de Investigación Periodística” en la UB desde hace dos décadas. El director de la carrera es Fernando Laborda, del diario La Nación.
El rector de la Universidad de Belgrano, Avelino Porto, me entregó hoy en forma sorpresiva un diploma como reconocimiento a mi "valiosa tarea académica y a los valores personales con que honra a esta institución". Hace 20 años que soy docente de la UB. Gracias doctor por su apoyo pic.twitter.com/r9Whns6zE6
— daniel santoro (@dsantoro59) April 8, 2019
Uno de los libros obligatorios en su materia es "Técnicas de investigación. Métodos desarrollados en diarios y revistas de América Latina". En el prólogo, realiza un leve homenaje al periodista Horacio Verbitsky, el mismo que difundió varias de las informaciones del caso D'Alessio en su sitio El Cohete a La Luna.
En ese mismo libro, se hace referencia a la investigación que Verbitsky hizo en 1991 sobre el caso Swifgate que forzó al entonces presidente Carlos Menem a cambiar la mitad de su gabinete.
Daniel Santoro se quebró: "La bajeza de decir que fui un espía me duele en el alma"
Entrevistado en Net TV por Jorge Fontevecchia, Santoro reconoció que crear un vínculo amistoso con una fuente no es lo más adecuado. “Con personajes como D'Alessio no se debe hacer, yo eso lo leí en Los Angeles Times, ellos propusieron sacar el off the record que sería genial, luego el Washington Post contó que Sadam Hussein tenía armas de destrucción masiva, y dijieron que el editor debe saber quién es la fuente del periodista que va a ser publicada”.
“Yo viví el caso de que me pincharan el GPS, los emails, me amenazaron de muerte, son cosas que te duelen. Estamos solos, hay momentos de la vida que estás solo con una persona y te da miedo. No hay que dejar que la fuente nos conozca nuestro perfil psicológico”, admitió. “La bajeza de decir que fui un espía, me duele en el alma”, lamentó.
Las acusaciones en su contra tuvieron consecuencias en su ámbito laboral. Luego de ser acusado de realizar informes de inteligencia sobre sus compañeros del programa Animales Sueltos, el periodista decidió alejarse del ciclo televisivo.
B.D.N./FeL