El fiscal Carlos Stornelli y el abogado Marcelo D’Alessio fueron involucrados en un nuevo presunto intento de extorsión. Así lo reveló una publicación del sitio web El Cohete a la Luna firmada por Horacio Verbitsky. De acuerdo a la nota, "uno de los denunciantes es el ex secretario presidencial Pablo Barreiro, a quien le pidieron 250 mil dólares". El periodista asegura que Barreiro "se reunió con Stornelli y junto a su hermano Raúl Barreiro "aportaron 40 mil dólares para no ser encuadernados por el fiscal Carlos Stornelli y el juez Claudio Bonadio". La denuncia habría sido presentada el viernes 15 en el juzgado federal de Dolores, a cargo de Alejo Ramos Padilla.
La abogada del empresario que acusó a Stornelli asegura que D'Alessio "no está loco"
El padre de ambos, Ricardo Barreiro, fue detenido en septiembre de 2018 en el marco de la causa de los "cuadernos de las coimas", que investiga los presuntos sobornos vinculados a la obra pública durante el kirchnerismo. En diciembre del año pasado, fue excarcelado por decisión de la Sala I de la Cámara Federal de Apelaciones. Según Verbitsky, en este nuevo presunto intento de extorsión hubo "dos estudios jurídicos que se disputan el cliente, para representarlo ante los encuadernadores. Uno es el de Rodrigo González y Marcelo D’Alessio. Otro, el del ex juez Fernando Archimbal y el abogado Luis Vila". El periodista asegura que "luego de un paciente trabajo de persuasión, Vila llevó a Pablo Barreiro a declarar ante Stornelli, aunque no quedaron constancias en el expediente, porque después de leer la declaración de Barreiro, "'el doctor Glock dijo que no le interesaba nada de lo que había contado y que no lo aceptaría como arrepentido. Sólo buscaba material incriminatorio contra Cristina'".
Siempre de acuerdo a la publicación, todo comenzó cuando Ricardo Barreiro fue detenido hace cinco meses y Pablo Grilo, amigo de su hijo Pablo, "lo llamó y le dijo que debía ponerse en contacto en forma urgente con Carlos Liñani o Linani, a quien Pablo conocía como Charly. El 4 de octubre los dos hermanos se reunieron con Charly en el hotel Hilton de Puerto Madero Los Barreiro decidieron grabar la conversación, que duró desde las 19 hasta las 22, y todas las subsiguientes".
El texto continúa: "Barreiro identifica a Charly como dueño del restaurante El Obrero y cuenta que le dijo que si no arreglaba con los abogados Marcelo D’Alessio y Rodrigo González, le pondrían el casco y el chaleco blindado. También que en el juzgado tienen una carpeta muy grande sobre 'Baby Barreiro'. Señaló que para resolver la situación de padre e hijo debían 'sentarse con el fiscal Stornelli', cosa que arreglarían. 'Describió a D’Alessio como abogado de la DEA y de la embajada de Estados Unidos', dice que González 'está todo el día con Bonadio” y que 'estuvo vinculado a las causas del Padre Grassi y a la Nisman'. Ellos 'pueden solucionar el tema por su estrecho vínculo con el fiscal Stornelli', dice Charly" . Según Verbitsky, "Charly los puso en contacto por WhatsApp con Marcelo D’Alessio, quien les dijo que él podía interceder para que se retiraran los autos de la SIDE apostados frente al domicilio de Barreiro. Quedaron en encontrarse con D’Alessio al día siguiente a mediodía, pero los hermanos evaluaron que eran víctimas de una extorsión y decidieron no acudir. Tras esto, D’Alessio le habría mandado audios con tono amenazante.
En este marco, Pablo Barreiro "le contó lo sucedido a su abogado, Luis Vila, a quien le dijo que además de su tono amenazante, los mensajes de D’Alessio contenían 'información que solo se tenía en la fiscalía'. Pero en ese momento, el otro grupo les habría hecho saber que conocían que se iban a presentar con Vila. Según el relato, Vila se habría reunido con Stornelli para preguntarle qué sabe de D’Alessio. El fiscal se habría mostrado sorprendido y había dicho que no eran personas que trabajaran con él. Según la publicación, Pablo se presentó ante el fiscal Stornelli el 8 de octubre “acompañado por Vila” y “le contó al fiscal nuevamente y expresamente” lo sucedido con D’Alessio y González. “Mi hermano estuvo aproximadamente una hora en la fiscalía declarando. Me comentó que iban escribiendo en una computadora lo que él iba redactando, pero nunca le dieron copia de su declaración”, dice. “También me contó que lo atendió el fiscal Stornelli personalmente y que estuvo presente durante toda su declaración”, señaló. “Nunca supimos qué pasó con esa declaración porque no hay constancias en el expediente”, afirmó, de acuerdo a información publicada en Página 12.
La detención de D’Alessio suma más tensión en Comodoro Py
Según la denuncia, agrega: “el abogado Vila nos refirió que la estrategia de acordar con el fiscal era la elegida y la más conveniente. Pero que dicha estrategia, que conducirían Vila –ex juez en Comodoro Rivadavia– y Archimbal –ex juez a quien se vinculó con la ex SIDE– tenía un costo para nosotros de 250 mil dólares. Cuando le manifestamos que no podíamos pagar ese monto, Vila nos dijo que si no podíamos pagar ese dinero, entonces su estudio no podía seguir adelante con la defensa. También nos dijo que él (Vila) iba a hablar con el fiscal para decirle que no podíamos pagar los honorarios e iba a renunciar a la defensa. Eso nos generó mucha preocupación dada la insistencia de que Vila y Archimbal manifestaron que se había hablado con Bonadio y Stornelli, por lo que mi hermano y yo tuvimos que pagar 40 mil dólares por haber entrado al despacho de Stornelli gracias a los buenos oficios de ambos abogados” y para “no tener ningún problema”.
De acuerdo a lo publicado, Vila y Archimbal "les pidieron 250 mil dólares por su gestión, pero los hermanos Barreiro no los tenían y todos sus bienes estaban inhibidos. Vila le dice que les dará facturas pero no por ese monto, sino por 250 mil pesos. En un regateo similar al de D’Alessio con Etchebest, Vila pide al menos 100 mil dólares para seguir". Ante la negativa de los hermanos, "les reclamó por lo ya hecho 50 mil pesos, que se redujeron a 40 mil, por haber llegado al despacho de Stornelli a través de ellos".