Un comienzo de 2023 con emociones fuertes para Boca y sobre todo para Agustín Rossi, la ahora cuenta pendiente de la dirigencia xeneize luego de que no se llegara a un acuerdo para que siga siendo jugador del club.
Convirtiéndose en uno de los nombres más destacados, por no decir el más determinante, en Boca en la pasada temporada apareciendo en momentos clave que le significaron títulos al conjunto de la Ribera, Rossi y el club no llegaron a un acuerdo para renovar su vínculo que vencía en junio de este año.
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La intención del arquero era obtener una considerable mejora en su sueldo, teniendo en cuenta, un factor determinante en la negociación, el tipo de cambio en el que vería reflejado sus ingresos el ex Lanús. Pese al esfuerzo, según expresaron desde el Consejo de Fútbol comandado por Riquelme, el club no logró cerrar números con el arquero que acordó, para la sorpresa de varios, su acuerdo al Flamengo a mediados de este año.
Firmando un precontrato con el conjunto de Río de Janeiro, el arquero de 27 años selló su arribo al fútbol brasileño a partir de julio de 2023 hasta diciembre de 2027, cumpliendo así su contrato con Boca y llegando a su nuevo club como jugador libre. En un momento la dirigencia del Fla analizó la posibilidad de desembolsar 300 mil dólares para sumarlo al plantel de Vitor Pereira de inmediato.
Esa intención del vigente campeón de la Copa Libertadores no llegó a buen puerto, teniéndolo a Rossi con la obligación de quedarse en Boca a cumplir su contrato. Estas eran malas noticias para el ex Defensa y Justicia, ya que luego de que se confirmara su partida al Flamengo el Consejo de Fútbol lo colgó, dejando de lado su titularidad que hasta hace pocas semanas era indiscutible.
Su viaje junto con el plantel, a pesar de saber que no vería acción, a Arabia Saudita por la Supercopa Internacional ante Racing significó un cambio drástico en el futuro inmediato de Rossi. Las negociaciones por el préstamo del jugador se cerraron en apenas 48 horas entre el Al-Nassr y Juan Román Riquelme, cuando la delegación de Boca se encontraba en Al Ain para afrontar el compromiso ante Racing que terminó en derrota para el equipo de Ibarra.
Incluso el acuerdo fue tan rápido, que en pleno retorno hacía Argentina, en una de las escalas en Madrid, Agustín Rossi recibió un llamado del club árabe, tomó sus pertenencias, se despidió de sus compañeros y se bajó del avión para quedarse en Europa para luego cambiar de rumbo nuevamente hacía Arabia Saudita para sellar su llegada al equipo de Cristiano Ronaldo y el “Pity” Martínez.
De esta manera, en un abrir y cerrar de ojos Agustín Rossi dejó de ser arquero de Boca y ya se encuentra en Riad para realizarse la correspondiente revisión médica y firmar su vínculo con el Al-Nassr. Firmando su préstamo hasta junio de este año, ya que una vez vencido ese lapso se incorporará al Flamengo, club con el cual ya firmó un precontrato para ser su jugador hasta diciembre de 2027.
Todo indicaría que sería una negociación que le rinde a todas las partes. Por su parte Rossi tendrá rodaje antes de arribar a Río de Janeiro, algo que le preocupaba y mucho, tomando el lugar del colombiano David Ospina, además de darse el lujo de compartir plantel por unos meses con Cristiano Ronaldo.
En cuanto a Boca, si bien no es una suma considerable, teniendo en cuenta lo que pudo haber significado una venta de Rossi, por este préstamo Al-Nassr recibirá un cargo de aproximadamente 1.300.000 dólares.
De esta manera, el Xeneize pasó de dejar ir a un futbolista clave gratis a percibir casi un millón y medio de dólares, lo que se traduce en una pequeña victoria en una situación que siempre se le presentó cuesta arriba.
