Las intenciones de los jugadores, dirigentes y del Daniel “Rolfi” Montenegro en convencer a Domínguez de que continúe al mando del equipo fueron en vano. El “Barba” no da marcha atrás y el portazo a Independiente es definitivo.
Eduardo Domínguez llegaba como una figura importante para hacerse cargo del primero equipo del Rojo en enero. Pese al entusiasmo que presentaba la llegada del finalista con Colón en la Copa Sudamericana, la misma se esfumó de manera repentina. El ahora ex DT de Independiente no superó los seis meses al mando del equipo con una estadística negativa.
Eliminado en primera ronda de la Copa Sudamericana, mirando desde abajo los primeros puestos en la Liga Profesional. La dirección técnica de Domínguez en el Diablo de Avellaneda fue de 29 partidos que se desmenuza en 10 victorias, 9 empates y 10 derrotas. Con estos números negativos el único gran objetivo que deja latente Domínguez en Independiente para intentar salvar un semestre que parece irremontable es la Copa Argentina (su próximo rival es Vélez).
“Estoy tranquilo porque di todo”, expresó Domínguez post renuncia. El DT de 43 años le agradeció a Montenegro en primera instancia por tenerlo en cuenta para el proyecto y también por la intención de tratar de convecerlo de quedarse. A pesar de las ganas del club, Domínguez tenia otra mirada, quería dar un paso al costado.
Pese al pedido de los jugadores, Eduardo Domínguez se fue de Independiente
¿A qué se debe la salida de Domínguez? Hay varios puntos a tener en cuenta. En primer lugar, el DT nunca encontró un equipo sólido y que se adapte a su forma de juego quedando eliminado en primera fase en la Copa Sudamericana y Copa de la Liga Profesional. Sumado a eso, en el corriente certamen local lleva tres derrotas consecutivas y marcha con apenas siete puntos alejados del pelotón de arriba.
Por su parte, Domínguez advirtió la ruptura en la relación con alguno de sus dirigidos, el último caso fue el de Damián Batallini que no le gustó salir en el clásico. Los últimos dos empujones para decidir irse fue la falta de refuerzos y sobre todo la reacción de la gente.
El DT sintió que el público le soltó la mano y los pasacalles en la previa del duelo ante Racing hablaron por sí solos. Así que Eduardo no mira hacia atrás y abandonó un club en el que nunca terminó de asentarse.
Por el momento el que toma la silla caliente es Claudio Graff, técnico de la reserva del club. La intención de la dirigencia sería repatriar a Ariel Holan o intentar tentar a Gabriel Heinze. Son dos técnicos muy difíciles de seducir en lo que será una danza de nombres que va a revolotear en las próximas semanas en Independiente.
La decisión del próximo DT del Rojo será responsabilidad del actual presidente Hugo Moyano y el mencionado Montenegro, secretario deportivo. Sumado a eso, la paz no reina, y esta podría ser la última decisión gravitante de Moyano como mandamás en Independiente.
El panorama electoral
La Cámara de Apelaciones de Lomas de Zamora revocó la sentencia en primera instancia que sostenía que Fabián Doman, quien se postula para presi, no podía participar en los comicios por supuestas irregularidades burocráticas en la presentación de documentación requerida. Resuelta esa cuestión que impedía la postulación de Doman, quedó habilitado de participar del acto eleccionario que le quita el sueño al socio del club.
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Tras la renuncia de Domínguez y la revocación de la sentencia, el propio Doman publicó en su cuenta de Twitter un mensaje tajante. “Le pido a Hugo Moyano, Yoyo Maldonado y la junta electoral de Independiente que convoquen a elecciones ya!”, comentó el periodista. Ahora sólo queda aguardar.
El fallo del Tribunal sirvió para reactivar el pedido de llamado a elecciones, algo que deberá ser establecido por la Comisión Electoral durante la asamblea que se realzará en el club el próximo 21 de julio. Un guiño más para Doman es el termómetro del hincha. Los socios del club se autoconvocaron el 22 de julio bajo el lema “Basta Hugo Moyano” para meter más presión para el llamado a elecciones. Días decisivos para el futuro de Independiente que necesita levantar cabeza.
BL PAR
