Hace varios días que ya quedó definido que Argentina y Francia se medirán en la cita máxima de Qatar 2022. Pese a eso con el correr de las horas la ansiedad y la necesidad de que la pelota empiece a rodar son cada vez mayores. Incluso, con la euforia de que el equipo de Lionel Scaloni, más argentinos siguen llegando a Medio Oriente para evidenciar una noche que será histórica.
Respecto a la situación futbolística y cómo llega cada plantel a la final del próximo domingo, ambos combinados estarían atravesando realidades diferentes. Por una parte, Francia llegó al Mundial con varias bajas y muy sensibles de hecho. Kanté, Paul Pogba, Kimpembe, Nkunku y una de sus figuras más rutilantes en los últimos tiempos, el ganador del Balón de Oro, Karim Benzema.
Este último caso tiene la particularidad de que puede sumarse nuevamente al plantel francés, ya que se encuentra recuperado de su lesión. Ahora será una decisión pura y exclusivamente de Didier Deschamps en incluir de nuevo en el plantel al centrodelantero. Sumado a eso también hay fuertes versiones de que hay tres integrantes del plantel que presentan cuadros gripales. Estos son Coman, Rabiot y Upamecano, con estos dos últimos siendo habituales titulares.
Pese a esas situaciones, no son todo dolores de cabeza para Deschamps. Su equipo viene de superar de gran manera a Marruecos que presentaba cierta presión sobre el equipo. El equipo africano llegaba naturalmente con el apoyo de todos los neutrales, además del público marroquí, haciendo que se vuelque toda la presión del lado del equipo francés.
Sortearon esa situación y se metieron de nuevo en una final de la Copa del Mundo. Repitiendo la hazaña de Rusia 2018, el equipo de Deschamps quiere ir por su segunda conquista mundial consecutiva y sumarse a Italia y Brasil, los únicos combinados en ser bicampeones mundiales.
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Sumado a eso, en pleno partido habrá una puja importante por quién no solo se llevará el máximo galardón, sino que también habrá una ardua competencia por la bota de oro, premio que se le otorga al máximo goleador del certamen. En Argentina, los goleadores son Lionel Messi con cinco tantos y Julián Álvarez con cuatro.
En Francia, sucede lo mismo con Kylian Mbappe con cinco gritos y Olivier Giroud con cuatro en su cuenta personal. De esta manera, si bien todas las luces estarán puestas sobre Messi y Mbappe, habrá una gran competencia por ese galardón en la final del domingo.
Respecto a la Selección Argentina, en el plano físico no tiene mayores inconvenientes. Los únicos dos futbolistas que trabajaron de manera diferenciada fueron Alejandro “Papu” Gómez y Lautaro Martínez, pero que para el compromiso del domingo estarán a disposición de Lionel Scaloni.
Por otra parte, quienes ya se encuentran al 100% son Rodrigo De Paul y Ángel Di María. De esta manera el rosarino pide pista para poder reingresar en el once titular. De todos modos, Scaloni se inclinaría por la formación utilizada con Croacia con el 4-4-2, metiendo más gente en el medio.
Sumado a la posibilidad de contar con Di María, también vuelven a estar disponibles Gonzalo Montiel y Marcos Acuña. Hay que recordar que ambos jugadores estuvieron suspendidos para el último partido por acumulación de tarjetas amarillas.
De esta manera, con todos sus soldados a disposición, Scaloni empieza a diagramar en su cabeza lo que será el once para enfrentar a Francia. Puede aparecer el 4-3-3 con Di María como extremo junto con Messi y Julián en el ataque, repetir el 4-4-2 con Leandro Paredes haciendo de doble cinco con Enzo Fernández o por qué no también puede surgir el 5-3-2 con la aparición de Lisandro Martínez como tercer central junto con Nicolás Otamendi y Cristian Romero con la intención de cortar posibles vías de ataques franceses.
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De esta manera, con sus altibajos, con sus situaciones, Argentina y Francia llegan con un único objetivo al partido del domingo: ganar. El duelo será a partir de las 12:00 (hora de Argentina) en el Estadio Lusail. Será el tercer enfrentamiento por mundiales entre ambos combinados y el decimotercero en el historial general. La recorrida de enfrentamientos entre ambos tiene arriba a Argentina en el historial con seis triunfos albiceleste, tres empates y tres derrotas.
En cuanto a compromisos mundialistas sigue la misma tendencia a favor de Argentina, en tres enfrentamientos en los mundiales de 1930, 1978 y 2018, fueron dos triunfos para la selección y una derrota. Claro está, el último antecedente les saca una sonrisa a los franceses ya que fue triunfo de los europeos por 4-3 en los octavos de final de Rusia 2018.
Una derrota que significó la dura eliminación del último Mundial. En consecuencia, con todos esos condimentos, Argentina ante Francia será una final que se remite a la historia y al presente para definir al mejor del mundo.
JL PAR
