Más de 100 organizaciones especializadas criticaron fuertemente los cambios en legislación ambiental que establece el proyecto.
Los glaciares, en peligro |
NA
En su plataforma electoral, La Libertad Avanza prometía convertir a Argentina en un país exportador con altos estándares ambientales y promover la preservación de los recursos, sin embargo, el proyecto de ley Ómnibus parece olvidar dicha promesa, según detalló Pablo Corso en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1).
Mediante un comunicado, más de 100 organizaciones especializadas han criticado con dureza los cambios propuestos en la legislación ambiental que impulsa el Gobierno, argumentando que no tienen ninguna relación con las necesidades y urgencias que atraviesa Argentina. Estas organizaciones centran sus críticas en tres puntos principales.
En primer lugar, señalan que los cambios en el control de las actividades de quema ignoran el papel de las autoridades locales en el manejo del fuego, el cuidado de la seguridad y la salud, así como las sanciones en caso de impactos negativos.
Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
El segundo punto, verdaderamente delicado, es la eliminación de las asignaciones fijas para el fondo que garantiza el funcionamiento de la Ley de Bosques. En un primer borrador, incluso se permitía el desmonte en zonas clasificadas como rojas, donde la deforestación está absolutamente prohibida. Más tarde, el oficialismo alegó que se trataba de un error y borró este punto.
El tercer punto es aún más delicado, ya que excluye de las medidas de protección de glaciares a aquellos que no están en el Inventario Nacional de Glaciares, considerando sólo a aquellos que tienen "una condición hídrica efectiva y relevante". Esto implica un cambio significativo al pasar de considerar los recursos estratégicos a meras plataformas para cualquier proyecto de explotación.
Un referente de una de las organizaciones involucradas en el tema expresó que esta es una regresión tan enorme que no resistirá a nivel judicial. En este mismo programa se ha hablado de las dificultades relacionadas con el dictamen y, por ejemplo, a las 14:30 las ONGs todavía no habían podido acceder a una versión final del mismo. Más tarde, a las 19, cuando la sesión ya estaba postergada, la confusión sólo había aumentado, ya que un borrador excluía los temas ambientales, mientras que otro los incluía sin ninguno de los cambios solicitados.
El referente ambiental comentó: "Estamos perplejos por esta desprolijidad". A las 10 de la noche, con el dictamen confirmado circulando por los medios, no se reflejaban las disidencias opositoras, ya que los diputados habían firmado un papel en blanco. El proceso de ayer fue bochornoso.
Ante este panorama, lo que se planteaba en el capítulo ambiental parece ser una jugada maquiavélica. Se califica como un supuesto error de reacción que habilitó la deforestación de todos los bosques, pero en realidad, es una cortina de humo para distraer la atención sobre los cambios en la ley de glaciares. Se asegura que estos cambios están hechos a medida de las multinacionales mineras. Una frase gráfica empleada para describir esta posible estrategia es que "hicieron como el tero: gritaron por acá y pusieron los huevos por allá".
